Dos parejas forasteras se encontraban en el local donde se celebraba una fiesta en La Hiniesta cuando otro joven, vecino del municipio, que estaba al lado comenzó a lanzar al aire un jersey y a molestar a las dos mujeres. Este acusado, de iniciales A.F., que dijo estar borracho y bailando, relató que uno de los forasteros, D.R., le recriminó su actitud, a lo que "le dije que me dejara en paz y me amenazó" señalándose el cinturón, hecho que niega el otro joven. A.F. indicó que le contó al principal acusado y vecino de La Hiniesta, J. A., lo ocurrido y salió fuera del local en el que se celebraba un baile. Al regresar, afirma que ya vio a la esposa de J.A. en el suelo con el joven que resultó herido en un ojo, A.L.M., y a este cogiendo una silla para golpear a D.R., una versión que no coincide con la ofrecida por este y sus amigos, que niegan ningún tipo de enfrentamiento con la pareja de La Hiniesta.

Sea como fuere, en el local "se formó un barullo", dijo J.A., quien negó que estuviera con quien tiraba al aire la prenda, pero indicó que uno los foráneos hizo "una burla previa hacia todos". Consecuencia del incidente fueron también los daños causados al automóvil de D.R. cuando trataba de abandonar el pueblo, valorados en 969,22 euros, de los que el dueño acusa a J.A., quien lo negó y cuyo abogado apuntó a un grupo amplio de personas que salió del establecimiento como consecuencia de otra pelea que se produjo en el mismo local.