Ana Sánchez invita a los dirigentes del Partido Popular a serenarse "porque están muy alterados". La secretaria de Organización del PSOE de Castilla y León y número dos del partido en la región considera que Pedro Sánchez gana enteros "casi a diario". A Podemos le pide flexibilidad porque, asegura, "no se puede entrar en escena como lo hizo" hace unas semanas. Estas son algunas de las reflexiones que hace la socialista en mitad del escenario político que vive España actualmente. El diálogo es el camino a seguir, según Sánchez. Y unas nuevas elecciones, a su juicio, serían "un fracaso colectivo" tanto para los políticos como para la democracia.

-Con Mariano Rajoy fuera de juego, Pablo Iglesias a la defensiva y Albert Rivera como único acercamiento, parece que la investidura de Pedro Sánchez como presidente se aleja cada vez más.

-No lo creo. Esta mañana he visto que Pedro Sánchez sigue manteniendo reuniones con los representantes parlamentarios y le encuentro optimista. Es verdad que la situación es muy compleja, pero él se mantiene muy firme. Pedro Sánchez es un hombre con una determinación muy clara, que además viene demostrando. Está convencido de que hay posibilidad de construir una alianza progresista y de cambio. Está buscando un gobierno progresista que es posible. No es el con quién, sino el para qué. Y el lunes preparará un documento que presentará a los distintos grupos centrado en la recuperación justa, en el empleo, en la lucha contra la desigualdad, en el pacto educativo, en derechos y libertades y en la reforma constitucional. A partir de ahí, los distintos grupos parlamentarios tendrán que decidir si quieren estar en eso o en sus cosas. Y me refiero a Podemos.

-El diálogo con Podemos parecía que iba a llegar a buen puerto hasta que Iglesias lanzó aquel órdago con los cargos repartidos. ¿Se sintió el PSOE chantajeado?

-Sin duda, así ha sido. Podemos cometió un error hace quince días con su puesta en escena y sus líneas rojas. Hasta la fecha, ninguna de las líneas rojas que Pablo Iglesias ha puesto sobre la mesa ha sido posible. Y hablo de los cuatro grupos parlamentarios, de la mesa, del referéndum de autodeterminación en Cataluña? Desde luego, el PSOE no va a consentir ninguna de estas cuestiones. Creo que Pablo Iglesias tiene que hacer un esfuerzo por entender que quien ha protagonizado el nuevo tiempo, como es su partido político, no puede una vez llega a las instituciones anclarse en situaciones del pasado, excluyentes, que es lo que él plantea en este momento. Una negociación exclusiva y excluyente con Podemos. Creo que se han equivocado en unas posturas maximalistas y estoy convencida de que en los próximos días rebajarán sus pretensiones, porque para llegar a consensos todos tienen que ceder en algo. Y Podemos no ha ganado las elecciones en este país, por lo tanto creo que tomará la actitud responsable que ya hemos visto en representantes de otras formaciones como Ciudadanos, PNV, Izquierda Unida y Coalición Canaria.

-El último acercamiento que ha tenido Pedro Sánchez ha sido el de Albert Rivera. Pero Ciudadanos dice que solo irá a un gobierno si también está el Partido Popular. ¿Cederá el PSOE?

-Si una cosa ha dejado clara el PSOE desde el primer momento es un no rotundo al Partido Popular y más especialmente con lo que hemos conocido en los últimos días, con casos de corrupción que no son aislados. El Partido Popular tiene un problema de corrupción estructural muy grave. Es un partido completamente asolado y carcomido por la corrupción en toda su estructura. Los socialistas creemos que el PP es un partido importante para la democracia española, pero tiene que renovarse en toda su estructura. Por lo tanto, creemos que en este momento no está en condiciones de pactar con nadie. Es verdad que el PP va a ser importante en los próximos años, especialmente en lo que tiene que ver con la reforma constitucional tan necesaria en este país, porque es cosa de todos. Pero no está en condiciones de garantizar la gobernabilidad de nadie. Desde luego, no para ellos, donde han hecho un ejercicio de irresponsabilidad absoluta, protagonizado por la espantada de Mariano Rajoy, ni tampoco para apoyar a los demás. Pedro Sánchez ha sido claro: él busca un acuerdo de gobernabilidad progresista y reformista y siempre ha puesto el acento en los partidos que representan el cambio que son Ciudadanos y Podemos.

-Alguna voz del Partido Popular ya ha amenazado con la "ingobernabilidad" del binomio PSOE-Podemos dada la mayoría popular del Senado.

-Me parece una irresponsabilidad más del Partido Popular que, insisto, no está en condiciones de pactar con nadie y mucho menos amenazar. Y además, las amenazas en política y en democracia sobran. Es verdad que el Partido Popular tiene mayoría en el Senado, pero todo el mundo sabe que donde se legisla es en el Congreso, que el Senado es una cámara de segunda lectura donde se revisan las leyes que vuelven al Congreso de los Diputados. Por lo tanto, eso no impedirá la gobernabilidad, como no la impidió en las legislaturas en que Zapatero gobernaba en minoría. Yo era senadora en ese momento y se aprobaron las leyes que el Gobierno consideró que había que aprobar. Es verdad que no hay una forma absoluta y absolutista, sino que hay que buscar un acuerdo entre todos los grupos políticos.

-¿Todos es todos, Partido Popular incluido?

-Los ciudadanos españoles han hecho un mandato muy complejo pero muy claro y que nos exige un plus de responsabilidad a todos los actores políticos. Y ser capaces de entendernos y apartar algunas diferencias para priorizar los intereses de los españoles en detrimento de los intereses de los partidos. El Partido Popular tiene que hacer un ejercicio de renovación y serenarse, porque se encuentran muy nerviosos y muy alterados.

-Partido Popular y Podemos apremian a Pedro Sánchez para someterse a la investidura cuanto antes y, quizá, forzar unas nuevas elecciones. ¿Teme el Partido Socialista someterse nuevamente ante las urnas?

-El PSOE no le tiene miedo a la democracia ni se lo ha tenido nunca. Es verdad que creemos que convocar unas nuevas elecciones significaría un fracaso colectivo de la democracia y de la responsabilidad de los políticos elegidos en este caso. Cuando los ciudadanos en las urnas hacen un mandato, saben perfectamente lo que hacen. Y nos han puesto ante un escenario difícil y complejo, pero eso no puede ser óbice para que uno se inhiba de sus responsabilidades. Eso es lo que ha hecho el Partido Popular y Mariano Rajoy. Una vez que el rey mandata a Pedro Sánchez liderar esa búsqueda de gobernabilidad en España, nosotros vamos a llegar hasta el final, agotando los plazos si es necesario y pensando en los intereses de España y la necesidad de tener un gobierno estable.

-Pero el barómetro del CIS coloca ya a Podemos por delante del PSOE en intención de voto en esas hipotéticas elecciones.

-Los datos del CIS han quedado completamente desfasados. Ese barómetro se hizo entre el 6 y el 11 de enero y eso no tiene nada que ver con la situación política actual, un mes después. Es poco creíble en este momento y personalmente considero que la credibilidad de Pedro Sánchez gana enteros casi por días, sobre todo por la determinación y valentía con la que ha afrontado intentar llegar a un acuerdo de investidura y de gobernabilidad.

-Antes hablaba de la "espantada" de Mariano Rajoy al rechazar la proposición del rey. ¿Ese movimiento le dejaría invalidado de cara a unos nuevos comicios?

-Rajoy quedó invalidado el día en que le mandó un mensaje a Bárcenas diciendo: "Luis, sé fuerte, hacemos lo que podemos". Además, creo que su comportamiento después de las elecciones, siendo el partido que ha ganado los comicios y que ha tenido siete millones de votos, ha sido de irresponsabilidad con el país, con los ciudadanos, con las instituciones y con la propia Casa Real. A nosotros no nos parece ni admisible ni serio. Y por eso hemos hecho radicalmente todo lo contrario. Por eso creemos que Mariano Rajoy queda descartado para el futuro político de nuestro país. No obstante, eso lo tendrán que decidir los militantes del PP, si es que en el PP alguna vez deciden preguntarle a sus militantes quiénes tienen que liderarles. En el PSOE hace tiempo que entendimos que las cosas han cambiado. Y fíjese, si finalmente Pedro Sánchez llega a un acuerdo de gobierno, éste tendrá que ser ratificado por los militantes del Partido Socialista.

-Parlamentarios zamoranos del Partido Popular aseguran que un gobierno de Pedro Sánchez sería devastador para la provincia de Zamora.

-Yo creo que si finalmente Pedro Sánchez consigue la investidura será bueno para Castilla y León. Será bueno para los mineros, para la sanidad, para la educación, para los servicios públicos, para los trabajadores de TRAGSA, para los de El Árbol?