El juez de Violencia de Género prepara ya el auto de procesamiento contra el anciano de 88 años recluido en la cárcel, desde el 6 de octubre pasado, tras el intento de homicidio o de asesinato de su expareja, de 76 años, que podría ser condenado hasta a 10 años de cárcel por acuchillar y causar heridas de gravedad en el cuello y en el abdomen a la víctima. A esa pena de cárcel se sumará la que se exija por las lesiones provocadas a un guardia civil jubilado que auxilió a la mujer.

El octogenario, de iniciales A.N. y excartero, permanecerá en prisión preventiva hasta que se celebre el juicio en la Audiencia Provincial, que podría fijarse en el primer semestre de este año, dado lo avanzado de la tramitación. El magistrado, que ha transformado ya las diligencias en sumario, volverá a escuchar al anciano una vez dictado el auto de procesamiento y antes de trasladar la causa al Ministerio Fiscal para que califique las agresiones y determine los delitos por los que le acusará, así como los años de prisión a exigir ante la Audiencia. La pena de cárcel por intento de homicidio que se solicitará oscilará entre los 5 y los 10 años, horquilla establecida en el Código Penal para ese delito.

El Juzgado tiene previsto que en los próximos días los médicos forenses completen el informe en el que determinarán si el hombre, de gran fortaleza física a pesar de su edad, a decir de los testigos, actuó en plenas facultades mentales. El resultado del examen forense será determinante a la hora de establecer el grado de culpabilidad del acusado, al indicar si actuó en plenas facultades mentales y con la intención de hacer daño a su víctima que salvó la vida porque la amiga que le acompañaba interpuso su bolso entre el cuchillo que portaba el anciano y el cuerpo de la mujer.

La intervención del exguardia civil para reducir al octogenario también fue esencial para salvar la vida de quien había sido durante 27 años compañera sentimental del agresor. El informe inicial del forense fue decisivo para que el magistrado accediera a mantener la prisión sin fianza solicitada para el imputado por el fiscal el 6 de octubre, una vez interrogado en sede judicial. La circunstancia de que el anciano actuara por sorpresa y con arma blanca, sin que la víctima tuviera posibilidad de defenderse, podrían agravar las penas a exigir por la Fiscalía. La agresión al exguardia civil jubilado que auxilió a la víctima para impedir que la agresión terminara en asesinato, también conlleva penas de cárcel al tratarse de un delito de agresión. La mujer estuvo ingresada en el Hospital Virgen de la Concha varios días con pronóstico reservado por las graves heridas, que hicieron temer inicialmente por su vida.