El Ministerio de Fomento apura la contratación de las obras pendientes para la apertura de nuevos tramos de la Línea de Alta Velocidad Madrid-Galicia, tras la puesta en servicio del ramal hasta Zamora, que desde mediados de este mes comenzarán a utilizar los trenes que con origen o destino en la comunidad gallega. Así, según informa Ical, ha iniciado el procedimiento para contratar los proyectos que doten de sistemas de seguridad nueve túneles situados entre la provincia zamorana y Orense.

Esta actuación deberá estar lista en un plazo no superior a los doce meses de acuerdo al calendario marcado por la sociedad ADIF (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) Alta Velocidad, dependiente de Fomento. La compañía pretende que la empresa adjudicataria tenga terminados a principios de 2017 los proyectos para que se instalen los sistemas de protección civil y seguridad de los túneles existentes en el tramo comprendido entre la localidad de Pedralba de la Pradería (Zamora) y Vilariño (Orense).

Asimismo, el Ministerio calcula que esta actuación, complementaria a las obras de la plataforma, requerirá de una inversión de 553.000 euros, ya que incluye la redacción de los proyectos básicos de instalaciones y de obras, así como de planes de autoprotección para siete túneles considerados "especiales" al tener una longitud superior a los mil metros. También se programará en otro informe su mantenimiento y las instalaciones eléctricas. En concreto los túneles afectados por el contrato del administrador ferroviario son, en la provincia de Zamora, los de Pedralba de la Pradería (de 1.700 metros de longitud), Requejo (2.420), Padornelo (6.853), Lubián (1.706), Hedroso (813) y Canda (7.206), y en Orense, Villavella (899), O Cañizo (5.371) y Espiño (7.917 metros). Este año, Fomento prevé invertir 1.077 millones de euros en el corredor Olmedo-Lubián-Ourense-Vigo, con el objetivo de cumplir su compromiso de terminar todo el corredor Madrid-Galicia en 2018.