La gestión externa -o "privatización", tal y como indican desde la oposición- del teatro Ramos Carrión implicará un gasto de 250.000 euros durante el próximo año, montante correspondiente a la adjudicación del contrato. Así aparece reflejado en los presupuestos de la Diputación Provincial para el próximo año, una cifra que salió a colación en la comisión de Economía y Hacienda celebrada ayer en la institución y en la que los grupos de la Corporación se posicionaron sobre los presupuestos para el próximo ejercicio.

El diputado socialista Manuel Antonio Santiago reforzó el primer balance de Antonio Plaza sobre el cuadro económico al considerar que las cuentas son "más de lo mismo y con eso no vamos a salir de los índices negativos en los que nos encontramos". En la comisión, el PSOE se abstuvo "por prudencia" y seguirá trabajando "en la posible presentación de enmiendas o propuestas para modificar el presupuesto". No será hasta la sesión plenaria cuando decidirán si mantendrán su abstención o, por el contrario, votarán en contra.

Por su parte, la diputada de IU Laura Rivera ya ha anunciado su voto en contra de los presupuestos. Además, advierte que la Diputación "incumple la Ley desde hace una década por dar subvenciones sin tener un plan estratégico, una medida recogida por Intervención en el informe sobre los presupuestos de 2016". De igual modo, Rivera subraya que "incumplen la Ley de Subvenciones en relación a las nominativas -las que no se otorgan en régimen de concurrencia- en cuyo caso debe acreditarse que existen razones de interés público, social, económico o humanitario que justifiquen la dificultad de la convocatoria pública". En este sentido, Rivera pide el cumplimiento de la Ley General de Subvenciones.

El diputado de Economía y Hacienda, Antonio Iglesias, precisó tras la reunión que "ningún grupo ha presentado una enmienda a la totalidad del presupuesto en la comisión". No obstante, el diputado del PP se muestra abierto a asumir propuestas de la oposición "siempre y cuando haya un planteamiento razonable desde el punto de vista económico, ya que no se puede aumentar gasto sin recortar de otro lado", razona.