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La exposición "Íntimamente público. Del entorno privado al Museo de Zamora" consagra un amplio apartado a "Archivos íntimos", denominación que agrupa los fondos documentales y bibliográficos exhibidos en varias vitrinas diseminadas por la sala de exposiciones temporales, a la que se accede desde la plaza de Santa Lucía.

Entre los conjuntos documentales más importantes que atesora el Museo figura el donado por los herederos de Eduardo Barrón. Una pequeña selección de él protagoniza un rincón de la muestra. Lo preside un autorretrato del artista donde Barrón luce todas las dignidades y a su lado está un escritorio para el que diseño y creó todos los elementos metálicos, mientras que en la vitrina se contemplan una hoja de méritos, su nombramiento como jefe de administración civil o fotografías.

Otro grupo documental significativo lo integra el archivo facilitado por Ana Isabel Almedral de su relación con el artista Jesús Gallego Marquina. Su interés común por la poesía hace que Gallego Marquina comparta con la filóloga sus versos. Algunos de los poemas que el zamorano escribió, misivas, felicitaciones o catálogos de exposiciones del artista pueden descubrirse en una vitrina, acompañada por unos óleos firmados por Gallego Marquina que atestiguan los fuertes lazos de amistad existentes.

Las donaciones documentales modestas también tienen cabida en la muestra, como un dibujo del Puente de Piedra en el año 1915, hecho por Leocadio Peláez; acuarelas de Francisco Somoza, o postales del entorno de la plaza de Santa Lucía, sin pasar por alto imágenes donadas por la familia de Cirilo Martínez Novillo, una vez concluida la muestra que de él albergó el Museo de Zamora, o una nueva versión de "Escena familiar" de Filuco, donada hace unos meses. Esta nueva imagen ofrece variaciones sobre la que protagoniza la Sala de la Ciudad del centro y refuerza el planteamiento de que fue un posado del que el autor "hizo al menos tres placas, tres versiones distintas". "Es un trabajo muy pensado y meditado que Filuco consideró importante", subrayan desde el Museo de Zamora.

Un tercer puntal de la exposición corresponde al ámbito titulado "Encuentros casuales", donde tienen cabida aquellos hallazgos que se hacen en excavaciones o de manera casual y que acaban en el museo. Entre las piezas más entregadas destacan las piedras de rayo, "las hachas de época neolítica y posterior, efectuadas en piedra pulimentada" de las que se exhiben dos ejemplos localizados en Villanueva del Puente; un plomo monotiforme con una representación curiosa de un elefante localizado en Cubillos, y otros elementos metálicos como unos colgantes fálicos, hebillas o piezas de decoración de mobiliario, como el fragmento de media cara que "podría ser un aplique de un mueble", todos procedentes de la zona de Tierra de Campos. A ellos se une estelas, como una pequeña presente en la muestra y hallada en Moreruela de Tábara, o un pasarriendas en forma de caballito que guarda semejanza con otro que es la imagen del Museo de Zamora, que procede de Villafáfila, mientras que el exhibido se localizó en Fuentes de Ropel.

Además la exposición tiene una pieza entregada el pasado año por Josefa de la Fuente. "Se trata de un elemento que no procede de Zamora, pero la donante trabajó en Écija en los años 70 y un día le hicieron llegar esta figura que habían localizado en el campo", explica el conservador, Alberto del Olmo. La pieza, de pequeñas dimensiones y que ahora está sobre una peana, "está identificada y reconocida como El Mercurio de Écija", concretan desde el Museo de Zamora al tiempo que añaden que la obra no se entendería en Zamora porque "tiene unas hechuras clásicas de copia romana de un original griego, habitual en zonas con una romanización más fuerte".

Por otro lado, el Museo de Zamora complementa esta exposición, que puede verse hasta abril, con un ciclo de conferencias. Este jueves a partir de las 20.00 horas el turno le corresponde al historiador toresano José Navarro Talegón que hablará de la implicación de la Fundación González Allende, que preside, en la restauración del patrimonio cultural en la ciudad de doña Elvira.