La rama sanitaria de UGT denunció esta mañana la situación del complejo asistencial de Zamora y reprochó a Castro sus declaraciones realizadas en días anteriores en las que afirmó que no se iba a contratar enfermeras para que estuvieran "mirando al techo". Jerónimo Cantuche, responsable del Área de Atención Especializada del sindicato, habló de un centenar de camas cerradas entre el Hospital Provincial de Zamora y el de Benavente y denunció también la situación de los pacientes "a quienes mandan a casa para evitar los ingresos y tienen que volver una y otra vez a Urgencias" y de los profesionales "a quienes obligan a agilizar las altas hospitalarias". Cantuche instó a Castro a que deje "de insultar a los profesionales, porque él está para motivar a los profesionales".

Por su parte, el gerente del Complejo Asistencial, Francisco Montes habló de camas "transitoriamente no funcionantes" y redujo el número de plazas inhabilitadas a menos de sesenta, 25 en Benavente y 30 en Zamora. Montes reconoció que el viernes había en total de 132 camas sin ocupar debido a "la falta de demanda" ya que insistió en que eran plazas que estarían disponibles en caso de que aumentase la presión asistencial. En cuanto a las goteras del Hospital Provincial, reconoció que habían aparecido "manchas en el techo de la tercera planta" que habían obligado a trasladar a 40 pacientes a la segunda, pero reconoció que se encuentran "dentro de la garantía de la obra y se están ya solucionando".