Medio centenar de enfermeras zamoranas viajaron ayer a Valladolid para manifestarse frente a la Consejería de Sanidad y reclamar la dimisión del consejero del área, Antonio María Sáez Aguado debido a la suspensión cautelar de las oposiciones por parte del Tribuna Superior de Justicia de Castilla y León. Representantes de los sindicatos -Satse y las ramas sanitarias de CC OO, UGT y CSI-F- denunciaron que el consejero se había negado a recibirlos pese a que la manifestación, que logró reunir a más de un millar de profesionales, logró cortar al tráfico el paseo de Zorrilla de la capital vallisoletana.

Los altos cargos de la Junta sí recibieron a los medios de comunicación y, a iniciativa de Satse, a cinco de las afectadas por la suspensión de las oposiciones, cuya solución creen que podría demorarse "meses o incluso años" hasta que se resuelva el contencioso, como explicó la secretaria de Satse en Zamora, María Ballesteros, presente en la concentración.

Después del viernes, cuando se celebrará la mesa de empleados públicos en la que se abordará el tema, desde los sindicatos anunciarán las medidas que se tomarán, que podrían pasar por más concentraciones en la Consejería, los distintos hospitales e incluso el Ministerio de Sanidad.

El PSOE pide explicaciones

Ana Sánchez, procuradora en Cortes del grupo socialista, anunció ayer que el PSOE pedirá la comparecencia del presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, a quien acusó de no haberse atrevido a decir "esta boca es mía" sobre el problema de las enfermeras. "Se trata de un sainete inadmisible en el que a ninguno de los dirigentes les ha importado un rábano las ilusiones y el trabajo de los veinte mil opositores que estaban convocados", protestó Sánchez, quien mostró su apoyo a los sindicatos a la hora de exigir la comparecencia inmediata de Sáez Aguado y su dimisión.

"Es absolutamente intolerable que Castilla y León sea el hazmerreír de toda España porque el presidente de la Junta ha arrodillado a los opositores ante sus peleas con el Gobierno" reprochó la procuradora socialista. Sánchez elevó también sus quejas a Génova y, concretamente, al antiguo presidente de la Diputación de Zamora. "¿Hasta cuándo va a consentir Fernando Martínez Maíllo las guerras de su partido con Castilla y León? ¿Y hasta cuándo piensa amparar a Sáez Aguado?" concluyó Ana Sánchez, mientras sus compañeros de partido se manifestaban junto a las enfermeras frente a la Consejería.