Encontrar un trabajo estable se ha convertido en una quimera para los miles de zamoranos que todavía engrosan las listas del paro. Con todo, la situación es todavía más complicada en el caso de las mujeres, que según las estadísticas se están viendo obligadas a aceptar empleos temporales y con jornadas parciales. Los datos del Observatorio del Servicio de Empleo Estatal son tajantes al respecto. "A pesar de las medidas adoptadas para fomentar el empleo estable, la evolución de la tasa de estabilidad en la contratación femenina no muestra el panorama esperado, y a lo largo del decenio se mueve entre el 6,28% de 2011 y el 10,76 de 2012".

En 2014, último año analizado, "la tasa de estabilidad se sitúa en un 7%, prácticamente igual que el año anterior y casi cuatro puntos porcentuales respecto al 2012, año en el que la tasa de estabilidad femenina alcanzó el valor máximo del decenio, a lo que sin duda contribuyó la regularización de la relación laboral de los empleados de hogar. El índice de estabilidad de las mujeres en la provincia de Zamora es muy similar al que se da en nuestra comunidad autónoma: 7,94%, y más baja que la tasa estatal: 8,76%". Los hombres superan ampliamente este porcentaje.

Así, siempre según los datos que acaba de publicar empleo dentro de su informe anual, "los contratos a jornada completa son mayoritariamente suscritos por hombres (60,79% frente al 39,21%).

Los contratos a jornada parcial son firmados mayoritariamente por mujeres 57,81%, lo que refleja una diferencia de más de 15 puntos porcentuales con los hombres. Los contratos temporales a tiempo parcial también son mayoritariamente femeninos pero en la diferencia es también de algo más de 15 puntos porcentuales, pero en el caso de los contratos indefinidos esta diferencia es mucho mayor, concretamente el 61,93% de los contratos indefinidos a tiempo parcial se realizan a mujeres lo que nos da una diferencia de casi 24 puntos porcentuales con respecto a los hombres". En muchos casos y aún en la actualidad, mujeres y hombres desempeñan trabajos distintos, lo que da una idea de la razón de la desigualdad en estos datos. "En el último decenio en los contratos a jornada completa la tasa de contratación masculina es siempre superior a la femenina mientras que en los de jornada parcial son mayoría mujeres en todos los años", concluye el SEPE.