La aplicación del nuevo Código Penal ha permitido a una joven eludir la pena de prisión que la Fiscalía le exigía por las lesiones causadas con un vaso de cristal a un varón, con el que entabló una discusión en un pub y al que previamente pegó una bofetada. La reforma que acaba de entrar en vigor establece para delitos de lesiones la condena a una multa o a prisión, si así lo estima el juez.

En este caso, la joven admitió los hechos y tendrá que abonar una multa de 540 euros, además de indemnizar al agredido con 1.350 euros y al Sacyl con otros 100 por los gastos sanitarios derivados de la atención médica que tuvo que recibir el agredido, cuyas heridas tardaron diez días en curarse.

El incidente se produjo a las 2.30 del 7 de octubre de 2012, cuando el joven se hallaba en un establecimiento hostelero del casco antiguo con una amiga y llegó la procesada, momento en el que ambos iniciaron una discusión. La joven abofeteó al varón cuando le insultó llamándola "puta". La reacción del hombre fue lanzarse contra la ahora condenada, que acabó golpeándole en la cara con un vaso de cristal que llevaba en la mano.

El joven sufrió dos heridas incisas de 2 centímetros y de 3 centímetros, de las que tardó en curarse diez días durante los cuales pudo continuar con sus actividades normales. Las secuelas que le quedaron fueron las consiguientes cicatrices de idénticas medidas.

La otra joven que acompañaba al herido intervino para abalanzarse sobre la agresora cuando esta se disponía a marcharse del local, mientras le amenazaba de muerte. Llegó incluso a seguir a la imputada hasta su domicilio y a aporrear la puerta del portal, al tiempo que le increpaba e insultaba.

Quince días después de este incidente, las dos mujeres coincidieron en otro pub de madrugada y la amiga del herido en el altercado volvió a insultar y a amenazar a la procesada, además de pegarle patadas.

La joven condenada denunció al herido y a la amiga de este, por lo que ayer se sentaron en el banquillo de los acusados los tres, aunque evitaron la celebración del juicio porque llegaron a un acuerdo. El Juzgado de lo Penal absolvió al joven y a su amiga de los delitos de agresión e injurias por los que se enfrentaban a sendas multas.