El incendio intencionado en las instalaciones de Huertas Moralejo, en el polígono de Los Llanos, arrasó la madrugada de ayer tres camiones, valorados cada uno de ellos en más de 30.000 euros; dos contenedores frigoríficos con plataforma, cuyo precio supera los 15.000 euros, uno de ellos con orejas de cerdo cuya venta en China habría reportado 50.000 euros; y 200 envases de plástico con un coste de casi 30.000 euros.

En total la empresa ha visto volatilizarse más de 200.000 euros, a los que su propietario debe agregar los daños causados en la nave, que, si bien no fue alcanzada por las intensas llamas, sufrió desperfectos en uno de los laterales, explicó a este diario su dueño José Luis Huertos, visiblemente afectado.

La Policía Nacional no descarta que este suceso, provocado con gasolina con la que prendieron los envases de plástico apilados junto a la valla, esté vinculado con un robo ocurrido en la oficina de Caja España, situada en la avenida de Galicia, en el barrio de San José Obrero.

Los ladrones habrían causado el fuego con la intención de desviar la atención de la policía al objeto de poder llevar a cabo la sustracción de dinero. La hora a la que el servicio de emergencias del 112 recibió la llamada telefónica de un ciudadano, que vio cómo un vehículo abandonaba a toda prisa la zona y se percató del incendio, y la hora a la que tuvo lugar el robo están muy próximas. Esa circunstancia vendría a confirmar la hipótesis que relaciona los dos incidentes, sobre la que trabaja la Comisaría de Zamora.

Los camiones permanecían estacionados en batería en el exterior de la nave, y junto a ellos las plataformas, lo que propició que el fuego se propagara de unos vehículos a otro, según indican desde el Parque de Bomberos de la capital. Fue, precisamente, "la radiación de los camiones" la que afectó a un lateral de la construcción. "Habrá que cambiar los paneles" de la pared deteriorada, así como "las persianas de las ventanas que se derritieron", agrega el propietario de la empresa.

La rápida acción de los bomberos, que acudieron a las 4.58 horas a la parcela 52 del polígono donde se ubica la industria cárnica, evitó que el incendio se extendiera y entrara por las ventanas, comentan desde el Parque de Bomberos.

Los ocho operarios, que se desplazaron hasta Los Llanos y trabajaron hasta las 8.30 horas, ante la importancia del incendio, se dividieron en dos equipos de cuatro: uno de ellos, centrado en el control de la nave para prevenir que las llamas tocaran el inmueble; el otro, volcado en los camiones, las plataformas y las cajas de plástico apiladas en el perímetro del recinto industrial, junto a la valla, que ya ardían. Su intervención se prolongó durante más de tres horas y media para desarrollar una labor intensa. "Actuamos con mucha rapidez porque la situación apremiaba", apuntan responsables de este servicio.