La aprobación de la Cuenta General de 2014 por parte de la Comisión de Cuentas ha desatado la tensión entre el equipo de Gobierno de IU-PSOE y el principal grupo de la oposición del Partido Popular. Las distintas estrategias políticas acabaron en una suerte de escaramuza sobre un asunto que en realidad no tiene mayor trascendencia práctica, ya que es un mero trámite de aprobación de un documento técnico. El alcalde, Francisco Guarido y su grupo pretendieron aprovechar la ocasión para, con su abstención, reiterar la crítica política al anterior Gobierno municipal, del PP, confiados en que los miembros de este grupo votarían a favor. Sin embargo, el grupo popular, liderado por Clara San Damián, optó por "contraprogramar" la estrategia del alcalde y también se abstuvo, lo que obligó a Guarido a votar a favor para evitar males mayores. Porque a pesar de ser un mero trámite, no aprobar la cuenta puede acarrear serias consecuencias para el Ayuntamiento, debido a la rigidez con la que se toma estos asuntos el ministerio de Cristóbal Montoro.

Lo sucedido el lunes parece que va a ser la tónica entre Gobierno municipal y principal grupo de oposición a partir de este mes, cuando el curso político entrará en velocidad de crucero. De hecho, 24 horas después ya hay otra polémica encima de la mesa. El viceportavoz popular calificó de "inédita" la suspensión de la reunión de la Junta de Gobierno Local que debía haberse convocado para el martes y señala que nunca se había dado un caso similar. "El órgano de Gobierno es fundamental para el desarrollo de la vida municipal", dice González Prada para quien el hecho de que no haya asuntos que tratar revela que "el Ayuntamiento está paralizado". El alcalde, Francisco Guarido dijo que la Junta de Gobierno no se ha convocado "porque los servicios no han remitido asuntos", por lo tanto no tiene sentido reunirla ya que, entre otras cosas, se pagan indemnizaciones a los concejales por asistir. "Es un gesto de honradez política", dice.