Los funcionarios zamoranos miran hoy a la reunión que se mantendrá en el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, donde verán la luz las condiciones laborales de los empleados públicos para el próximo año. Todo hace indicar que los 11.182 trabajadores del sector público tendrán una subida mínima de un punto en sus salarios de cara al próximo año. Es una cantidad baja, según los sindicatos del sector público en Zamora, que aseguran que "no sirve para compensar las pérdidas de los últimos años". Los sindicatos aún se acuerdan de la congelación salarial y de la reducción del 5% aprobada por el Gobierno de Zapatero en el célebre pleno de las Cortes de mayo del año 2011.

Los sindicatos han anunciado que pelearán por una subida del 1,5% en 2016, aunque admiten que es complicado. Los convenios del sector privado firmados en Zamora, por ejemplo, dejan un aumento de solo cuatro décimas durante este año (siete a nivel nacional), lo que rebaja el margen de maniobra.

No es la única novedad. La cifra de empleados públicos que tiene Zamora, que ha ido a menos si se comparan los datos actuales con los registrados al inicio de la crisis, podrá volver a crecer si se cumplen los pronósticos. Diversos medios han informado de que Hacienda planteará que la tasa de reposición de funcionarios aumente desde el 10% actual al 50%. Esto significa que, si ahora solo se cubre una plaza funcionarial por cada diez empleados públicos que se jubilan, a partir de los próximos meses se cubrirán cinco de cada diez. Una cifra insuficiente para los sindicatos de la provincia pero que es objetivamente mejor que la existente en la actualidad. En Sanidad y Educación se cubrirán todas las plazas.

Los datos que maneja el sindicato CSI-F indican que en los últimos cinco años se han jubilado más de 130 empleados públicos en la provincia, plazas que por lo general no han sido cubiertas salvo en servicios esenciales. Eso por lo relativo a los funcionarios, pero el personal laboral también ha tenido buen número de jubilaciones, más de cien según los números que maneja el sindicato mayoritario de empleados públicos. En términos regionales, y sumando funcionarios y personal laboral, se han registrado más de 2.200 jubilaciones desde el año 2010. Las medidas de recorte del gasto público que se han llevado a efecto desde entonces no han permitido que la plantilla aumentara, al menos por esta vía.

La tercera gran batalla de la que estarán hoy pendientes los trabajadores públicos es la que decidirá qué ocurre finalmente con la paga extraordinaria suprimida en la Navidad del año 2012. Hasta ahora los empleados públicos han recuperado solo el 25%, lo que indica que las tres cuartas partes aún están por ser ingresadas en la cuenta. Aunque algunos funcionarios ya la han recuperado íntegra por otro tipo de cuestiones, todavía hay cerca de 10.000 personas en la provincia que están pendientes del sueldo que en su día fue eliminado.