El Ayuntamiento de Montamarta ha iniciado acciones legales contra el Ministerio de Fomento y contra la empresa concesionaria de la construcción de la autovía entre Zamora y Benavente, Autplata S. A., por la "alteración unilateral del proyecto" de construcción de la vía, según apunta el propio consistorio. La cuestión afecta a un pequeño tramo de la autovía y no al grueso de la obra.
La zona donde se ha creado la controversia está en "el trazado del curso del desagüe de Los Chopos que cruza la glorieta 2 del enlace E-3". Esto supone, argumenta el Ayuntamiento, "el aislamiento definitivo del municipio hacia el entorno natural de desarrollo y crecimiento". El consistorio, como "poseedor y titular del bien afectado" -el desagüe de Los Chopos- "reclamará sus derechos", razón por la cual se han iniciado acciones legales.
La corporación municipal, afirma el alcalde Rogelio Conde en un escrito, "no permitirá el despropósito de imponer barreras al acceso en las debidas condiciones a las zonas de explotación agrícola". Además, insiste en "el ánimo de restituir la posesión del terreno" y exige a Fomento "el cumplimiento del proyecto" planteado inicialmente "respetando las entradas" que en él estaban planteadas. Según el escrito del gobierno municipal de Montamarta "la perturbación de esta posesión pública a partir de una intencionada alteración al margen del proyecto" genera "un punto negro de accidentes al no contemplar los radios de giro". Esto, siempre según el Ayuntamiento, "compromete innecesariamente la seguridad de los vecinos y usuarios".
En este sentido la corporación municipal trabaja para "exigir el cumplimiento de la ley". Así, se han puesto los hechos en conocimiento de la Fiscalía "ante la grave y reiterada persistencia en la actitud intransigente y de no colaboración" tanto "por parte del Ministerio de Fomento como de la empresa adjudicataria". El Ayuntamiento comunicó hasta cuatro veces entre enero y febrero la situación derivada de la modificación del proyecto.
"Contra el aislamiento"
Para el consistorio de Montamarta tiene especial relevancia el "aislamiento" que, a su juicio, sufrirá el pueblo de no cambiar la actual construcción de la vía. En este sentido recuerda además que "en un acto de responsabilidad por el nuevo escenario de las vías de comunicación" se han impulsado "distintas empresariales de orden económico y social para evitar el aislamiento, la pérdida de población en el entorno rural y la depresión económica".
Los dirigentes del Ayuntamiento solo se darán por satisfechos si la empresa concesionaria y Fomento "cumplen con el proyecto expuesto e informado públicamente". En este sentido, subrayan que "es necesario que se nos notifiquen las modificaciones del proyecto que no se ajusten a los planes iniciales y que afecten al municipio de Montamarta, tanto las futuras como las ya ejecutadas o en ejecución".
El Ayuntamiento acaba su carta cargando contra las empresas constructoras. "Ya está bien", apunta, "que las empresas constructoras que se lucran de los bienes públicos generen pobreza intencionadamente a los ayuntamientos titulares y luego pretendan intimidar y acallar las justas reivindicaciones de sus víctimas por intereses espurios".
