El equipo de Gobierno del Partido Popular en el Ayuntamiento de Zamora está dispuesto a pedir a la Junta que revise los planes para derribar la capilla del Hospital Provincial, debido a la corriente ciudadana que se ha movilizado en favor de la conservación del inmueble y al interés arquitectónico que tiene, a pesar de no estar catalogado. Se da la circunstancia de que el pasado martes Izquierda Unida presentó en la Comisión de Cultura una propuesta en la que se oponía al derribo de la capilla e instaba a la alcaldesa a iniciar conversaciones con la Junta para mantenerla y convertirla en un centro de dotación comunitaria del barrio de Los Bloques. El PP se opuso a la urgencia de la moción y por tanto la rechazó "de facto", aunque la presidenta, Marisol Sánchez, aseguró que la medida no se debió a una cuestión de fondo, sino a que consideraba que no era el foro adecuado para presentar la propuesta.

Sin embargo, uno de los hombres fuertes del actual equipo de Gobierno, Francisco Javier González afirmaba ayer que "creemos que debería ser posible revisar la cuestión. Hay un movimiento ciudadano al respecto y aunque la capilla esté previsto derribarla, cabe un replanteamiento de modificación del proyecto que contemplara el mantenimiento del edificio, siempre y cuando sea posible". A juicio del concejal, el hecho de que el edificio no esté protegido no quiere decir que obligatoriamente se tenga que tirar y confiesa su simpatía por el movimiento de personas de distintos ámbitos en la ciudad, que "están por la labor de que se mantenga". Cree que "merecería la pena conservar la capilla, siempre y cuando la Administración que hace el edificio lo admita y no afecte sustancialmente al proyecto. Creo que hay que tener en cuenta una modificación del proyecto". Respecto a la aparente contradicción entre sus declaraciones y el rechazo en comisión de la propuesta de IU en este sentido, González indicó que muchas veces la presentación de propuestas en comisión y en el Pleno es algo "reiterativo". Y también reconoció que en ocasiones no salen adelante mociones de la oposición no tanto porque el equipo de Gobierno no esté de acuerdo con el fondo del asunto, sino porque se plantean como un ataque directo al Partido Popular o el propio grupo mayoritario de la institución. Por ello, recomienda que, en casos como este de la petición de replanteamiento del derribo de la capilla el partido promotor de la iniciativa trate de llegar a un entendimiento con el resto de grupos para que la moción salga adelante.

En todo caso parece que el Ayuntamiento, que no había dicho esta boca es mía hasta ahora, parece dispuesto a hacer caso a la voz de la calle en esta materia.