El presidente de la Junta Pro Semana Santa, Antonio Martín Alén reclamó ayer algún tipo de ayuda económica o apoyo por parte de las instituciones con el fin de atender adecuadamente a los medios internacionales que acuden a cubrir la Semana Santa, como han sido este año productoras y televisiones de Estados Unidos, Chequia, Italia, Polonia, Australia o Filipinas, por citar algunas procedencias. "Hay que buscar personas que sepan de Semana Santa e inglés. Hemos tenido que echar mano de amigos y conocidos que son entendidos de Semana Santa y saben inglés para atender adecuadamente a estas personas, pero a base de poner su tiempo y de sacrificar incluso parte de su Semana Santa personal".

Repercusión

Los medios nacionales también se han hecho amplio eco de la Pasión zamorana, desde las televisiones estatales a Radio Nacional, Radio Euskadi o la revista especializada Viajar. Alén realizaba un balance "más que positivo" de la Pasión 2015. "En breve haremos un consejo rector para valorar los posibles errores y enmendarlos, pero en principio todo es positivo, porque ha habido mucha participación y ha discurrido con normalidad". El presidente cree que el marchamo de BIC (bien de interés cultural) "si se ha notado. Es un aliciente para los visitantes que no se hayan decidido por un destino concreto, es un acicate para que se decanten por nuestra ciudad. Se ha notado y así me lo han hecho saber hoteles, hostelería y comercio. También porque estamos saliendo un poco del atolladero económico".

El presidente de la junta de hermandades alabó el esfuerzo y buen hacer de los responsables de todas las cofradías, el apoyo institucional y el trabajo de otros sectores de la sociedad, incluidos los medios de comunicación "que ayudais a difundir la Semana Santa". Entre las costumbres que no gustan a Martín Alén figuran los aplausos y ovaciones que se están instalando en algunos momentos puntuales de la Semana Santa zamorana, aunque son muy puntuales. "A mi no me gusta. Es más, la gente calla esos aplausos y creo que son los de fuera los que quieren introducir esa tradición que no es zamorana. Nos distinguimos por el Silencio y recogimiento, no por los alardes de los aplausos. No soy partidario de eso".