La llegada de la Semana Santa dispara los desplazamientos por carretera, lo que también provoca un aumento de la vigilancia de los agentes de la Dirección General de Tráfico. A los consabidos radares fijos, ocho repartidos por las carreteras provinciales, hay que sumar los móviles, que son los que gestionan un mayor número de multas. Según la información que maneja Automovilistas Europeos Asociados (que ha elaborado una lista especialmente pensada para Semana Santa y teniendo en cuenta las multas cursadas por tramos de carretera), la A-52 será la vía que más vigilancia concentre. Le siguen la N-630, la A-6, la N-631, la A-62 y la A-66.

Por partes, la A-52 suele contar con radares móviles en el kilómetro 3 sentido creciente, kilómetro 21 en sentido decreciente, en el 31,9 (decreciente) y en el 102,1 (creciente). A estos hay que sumar los puntos de control de velocidad fijos, ubicados en los kilómetros 14,8, 58,45, 99,4 y 110,55. Por su parte la N-630, que ya cuenta con dos radares fijos en los kilómetros 254 y 261, suele sumar otros en los puntos ubicados en el kilómetro 210, 220 y 250. Los agentes que se colocan en la A-6 suelen hacerlo en el entorno del kilómetro 230 y en el del 257. Esto no quiere decir que los controles vayan a estar ahí, pero estas son las vías en las que los radares tienen mayor actividad sancionadora.

Los agentes de Tráfico en Zamora llevaron a cabo, a finales del mes pasado, la primera prueba referida a la señalización de la ubicación de los radares móviles. Según indicaron fuentes del servicio a este diario, la medida sirvió para reducir el número de multas en un 75% aproximadamente. Las principales diferencias se concentraron en las vías secundarias y en las travesías. Así, la señalización de los radares móviles en las autovías no supuso un especial impacto en el número de multas tramitadas.

Sin embargo, la actividad vuelve a la normalidad durante la Semana Santa. Los conductores no se encontraran en las carreteras con señales que indiquen la próxima presencia de un radar, lo que posiblemente incremente el número de sanciones.

Además, hay que recordar que la Dirección General de Tráfico ha rebajado el límite de denuncia en toda su red de radares. El margen de error que antes se aplicaba ha caído drásticamente en los últimos años.

Según la información a la que tuvo acceso este diario el radar "saltará" a 131 kilómetros por hora en autovías, una horquilla que se ha reducido drásticamente pues en la provincia se han llegado a permitir velocidades que superaban hasta en 20 kilómetros por hora la señalizada en este tipo de vías. Los cinemómetros empezarán a sancionar a una velocidad de 120 en vías señalizadas con 110, a 109 en carreteras con velocidad máxima de cien y a 98 en las vías donde la señalización marca un límite de 90. Por lo demás, hay un margen "estándar" de ocho kilómetros por hora para el resto de vías.