La Agencia Tributaria tendría que devolver a las comunidades de vecinos de Zamora más de 268.000 cobrados de más en concepto de céntimo sanitario entre los años 2010 y 2012. Así se desprende después de analizar las cantidades de gasóleo C despachadas en la provincia durante estos tres ejercicios -2010, 2011 y 2012-, datos incluidos en el portal estadístico de la Junta de Castilla y León. En total, en los 36 meses analizados los zamoranos compraron 44.786 toneladas métricas de gasóleo C, el usado para las calefacciones. Fueron 15.295 toneladas métricas de combustible en 2010, 12.437 en 2011 y 17.054 en 2012.
Cada tonelada métrica, compuesta por aproximadamente 1.000 litros de combustible, estaba gravada con seis euros de impuesto en concepto de céntimo sanitario. Zamora, y por extensión Castilla y León, es una de las provincias en las que este impuesto ha tenido menos incidencia con el tema de las calefacciones, ya que la Junta decidió no aplicar a este combustible la parte autonómica del impuesto.
En los últimos meses las comunidades de vecinos vienen reclamando ante Hacienda la devolución de las cantidades cobradas de más en los ejercicios en los que aún se puede recurrir. Los administradores de fincas aseguran que el aumento de las reclamaciones es una tendencia que se ha dejado de notar y que es "recomendable" por su carácter gratuito.
Sin embargo, para que las cantidades resulten realmente relevantes el consumo de combustible por parte de las comunidades de vecinos debe ser bastante alto. "En ocasiones a los vecinos no les compensa iniciar la reclamación para recuperar cantidades que pueden quedarse en los 100 euros", reflexionaba hace unos días Miguel Ángel Hernández, uno de los profesionales del sector consultados. Por ejemplo, para que una comunidad tuviera derecho a una devolución de 600 euros tendría que haber comprado 100.000 litros de combustible entre los años 2010 y 2012, una cantidad muy elevada teniendo en cuenta los consumos de muchas comunidades.
Las reclamaciones pueden realizarse directamente a través de la web de la Agencia Tributaria. Para ello, es necesario aportar facturas y hay que abrir una reclamación por cada uno de los suministradores.