Las tasas judiciales se han convertido en una cortapisa para el ejercicio de la abogacía. Así lo denunció el decano del Colegio de Abogados de Zamora, Norberto Martín-Anero, quien recalcó el "daño" que están haciendo a la profesión. "Las tasas limitan el normal acceso de los ciudadanos a la justicia", denunció y puso como ejemplo que en su despacho particular, esta circunstancia había provocado un descenso de los casos en un 70% con respecto el año anterior. "A la hora de ir al juzgado, se exige el pago de una tasa que muchas veces puede llegar a superar el honorario de un letrado, algo muy injusto", indicó.
Si el tema de las tasas judiciales sigue siendo un problema grave para la profesión que se ha mantenido en el último año, Martín-Anero también reconoció que otras preocupaciones de los letrados hace doce meses, como la supresión de los partidos judiciales, las limitaciones al funcionamiento de los colegios profesionales o las reformas previstas en la justicia gratuita, parecían haberse diluido.
"Debo admitir, con agrado, que todos esos proyectos legislativos parecen aparcados, o por lo menos aplazados, si bien no sabría decir si es definitivamente, porque el gobierno se ha dado cuenta de su error, o simplemente es debido a la proximidad de las elecciones", sugirió.
En su discurso de la fiesta patronal de la profesión, Martín-Anero defendió la labor social que la profesión realiza. En este sentido, enumeró las 2.839 solicitudes de justicia gratuita que se atendieron durante el pasado año. "Podemos presumir que estamos junto a la sociedad y, particularmente, junto a los más desfavorecidos", destacó. Además de la justicia jurídica gratuita, el decano agradeció la labor de los 25 letrados que conforman el Servicio de Orientación Jurídica (SOJ) diariamente "y de manera gratuita" para asesorar a las personas con menos recursos "y orientarles a la hora de solicitar la justicia gratuita", señaló Martín-Anero.
Sin miedo al futuro
Por último, aseguró que la abogacía "no tiene miedo a los retos que nos pueda deparar el futuro", señalando aspectos como las nuevas tecnologías, la eliminación del papel en los procedimientos judiciales o la mediación como solución de conflictos. "Todos estos nuevos procedimientos y cambios son acogidos sin miedo", aseguró.
Tras una eucaristía en la iglesia de San Vicente, en recuerdo de los colegiados fallecidos, el salón de plenos de la Diputación Provincial acogió el acto solemne de la fiesta patronal de los abogados, con motivo de la festividad de san Ildefonso, en el que se dio la bienvenida a los nuevos colegiados que se incorporaban al organismo zamorano. Después de realizar su juramento en compañía de sus padrinos, llegó el momento de rendir homenaje a los compañeros que han cumplido con 25 años de ejercicio profesional.
Ignacio Riquelme Recio, en representación de los homenajeados, fue el encargado de recibir a los nuevos abogados. "Entráis en una profesión apasionante, pero con muchas decepciones y disgustos, aunque merece la pena", subrayó. Como consejo, les animó a que "ante todo" fueran honestos con ellos mismos y que tuvieran siempre en cuenta "la prudencia, porque a vuestro lado está un cliente que confía en vosotros. No temáis pedir ayuda a cualquier compañero, pero tened en cuenta que el pleito es vuestro y debéis tomar vuestra propia decisión, siempre con cabeza", finalizó, deseándoles suerte en esta nueva etapa.
