La Junta de Castilla y León ha finalizado ya el Plan Global de Mejora de los Comedores Escolares, una revisión extraordinaria iniciada a raíz de la aparición de larvas de gorgojo en seis menús de colegios de Segovia y León. Pese a que los datos provinciales aún no han trascendido -no obstante, los comedores de Zamora han pasado con éxito los rigurosos análisis ordinarios- ya se han conocido los aspectos que los inspectores han tenido en cuenta para analizar la calidad de los servicios de comida. Un total de 21 parámetros relativos a las condiciones de los locales, condiciones de los equipos, prácticas de higiene alimentaria, manipuladores y herramientas de autocontrol.

La inspección llevada a cabo durante las últimas semanas en los 46 centros que ofrecen servicio de comedor en la provincia de Zamora ha valorado aspectos como el diseño y mantenimiento de los locales y el equipamiento; la higiene antes, durante y después de las operaciones; la formación en procedimientos de higiene y manipulación; o el control de diferentes parámetros como la calidad del agua, la temperatura de los alimentos -en cámaras de congelación y refrigeración- o el almacenamiento de alimentos no perecederos. Además, se ha hecho especial hincapié en el control de los alimentos que entran en los centros y de los que salen, así como la documentación que los acompaña.

Multa "importante"

El Plan Global de Mejora de los Comedores Escolares, impulsado por las consejerías de Sanidad y Educación, fue una reacción a la aparición de larvas en los menús que la UTE Seruniónsirvieron en media docena de centros de Segovia y León. Paralelamente a este examen extraordinario recién concluido, se llevó a cabo una investigación para esclarecer las causas que llevaron los gusanos a las sopas de los alumnos. Finalmente, la Junta decidió sancionar a la UTE con 134.601 euros por este incidente, una cifra que el consejero de Educación ha calificado de "importante" para después sentenciar que la administración "ha cumplido".