A poco más de cuatro meses para las elecciones municipales del 24 de mayo son aún muchas las incógnitas que se tienen que despejar en la carrera a la Alcaldía de la capital. El partido que ahora mismo ostenta la mayoría absoluta en el Ayuntamiento de Zamora, el Popular, debe buscar nueva cabeza para el cartel electoral, una vez que la alcaldesa, Rosa Valdeón, ha confirmado que no repetirá; en Izquierda Unida el camino parece más allanado para que repita Francisco Guarido, aunque la formación aún tiene que determinar cómo afronta su posible colaboración con los nuevos movimientos surgidos en la izquierda, siempre manteniendo su identidad; y otras formaciones hoy sin representación municipal pero con pujanza en las encuestas nacionales, como Ciudadanos, aún no han definido el nombre de su apuesta en la capital zamorana.

El más madrugador ha sido en esta ocasión el Partido Socialista de Zamora, ahora mismo principal grupo de la oposición en el Ayuntamiento, que llegaba a los aledaños de la cita electoral ciertamente dividido entre los sectores oficialistas y críticos. Sin embargo, ha encontrado un candidato, José Luis GómezJosé Luis Gómez, letrado de la Seguridad Social y exdirector provincial del INSS, con un marcado perfil técnico, que puede concitar el apoyo de todo el partido, o al menos no un rechazo frontal, como podía haber sucedido de haberse decantado por otra opción. El hecho de que Gómez se quedara solo en las primarias, sin contrincante, habla bien a la claras de que puede ser una persona de consenso. Su principal desventaja es que es nuevo en esto de la política de primera fila, aunque parece dispuesto a superar ese obstáculo con trabajo, y de hecho lleva tiempo con una intensa labor de reuniones con todo tipo de colectivos sociales y vecinales, dejándose ver por toda la ciudad.

Dirigentes

En Adeiza, otro de los grupos de la oposición en el Ayuntamiento el paso adelante que ha dado, una vez más, su principal dirigente, Miguel Ángel Mateos, allana mucho el terreno a la formación. Esperó casi hasta última hora, pero al final Mateos se ha convertido en el referente de la lista municipal de los independientes zamoranistas y el 30 de enero recibirá el voto favorable de sus compañeros de formación, salvo sorpresa mayúscula ahora mismo totalmente descartada. El tirón de Mateos, profesor muy conocido, respetado y apreciado en la ciudad es sin duda la principal baza de Adeiza para buscar de nuevo la representación municipal.

El que lo tiene más complicado es el principal grupo municipal, el que sostiene el Partido Popular. La marcha de la alcaldesa, Rosa Valdeón, y su falta de "feeling" con el presidente del partido, Fernando Martínez Maíllo, hacen difícil que alguno de los hombres fuertes del actual equipo de Gobierno tome el testigo. La designación de los candidatos populares, fuertemente centralizada, hace difícil que se filtren nombres de posibles aspirantes con un mínimo de fundamento. Pero en la ciudad desde hace tiempo surgen las inevitables quinielas. Descartado por poco probable algún "mirlo blanco" (en el argot, una persona extraída de los ámbitos profesionales con perfil inmaculado), como sucedió con Antonio Vázquez en 1991, lo más probable es que el equipo de Maíllo designe alguna persona de su confianza con tirón y experiencia.

En las quinielas una de las mejor situadas es la subdelegada del Gobierno, Clara San Damián. Joven, con un futuro prometedor, bien vista en Madrid, San Damián conoce por dentro el funcionamiento de la Administración Local y de su partido, del que fue portavoz. También ha ocupado puestos en la Administración Local, como concejala de Morales del Vino, de Zamora capital y diputada provincial con área de responsabilidad a cargo. Otro de los que suenan es Óscar Reguera, que cuenta en su haber con una gran trayectoria de gestión: fue director general de la Junta, gobernador civil y delegado de la Administración Regional, y ahora ocupa el puesto de parlamentario regional. Y otra de las bien situadas es Maite Martín Pozo, un valor en alza en el Partido Popular. Trabajó en el Ayuntamiento, fue jefa de Familia y ahora ocupa plaza de parlamentaria nacional. Además fue la designada por Maíllo para tratar de recomponer los buenos resultados del partido en la capital tras el bajón de las pasadas europeas del que responsabilizó a los malos registros de la capital. Es una de las personas que está preparando las reuniones con colectivos sociales y ciudadanos de cara a esta campaña.

Una de las ventajas del PP es que tiene suficiente "banquillo" del que echar mano en un momento determinado. De momento no tiene prisa en designar al candidato (o candidata) y su presidente apuntó que quizás se anuncie a principios del mes de febrero.

El trabajo como aval

En Izquierda Unida parece lógico que sea Francisco Guarido el cabeza de cartel electoral, ya que le avala un impecable trabajo en la oposición que ha llevado, poco a poco, a su formación a unos resultados históricos. Sin embargo, los militantes primero tienen que dar algunos pasos. El 25 de enero tendrán una asamblea para decidir si concurren a las elecciones en solitario o exploran la posibilidad de integrarse en una coalición de partidos. La idea es mantener las siglas, sean solas o acompañadas con otras, pero sin perder la identidad. Una vez resuelto este dilema, pasarán a elegir candidato.

Podemos, que no se presenta, está explorando también las posibilidades de concurrir con otros movimientos, como Ganemos, aunque no parece haber nada todavía cerrado y mucho menos el nombre de ningún candidato.

Otras formaciones pujantes a nivel nacional pero sin representación en Zamora, buscan también entrar en el Ayuntamiento. UPyD lo intentará con José Miguel Mateos, designado tras un proceso de primarias. Ciudadanos celebrará también primarias más adelante, a primeros de febrero. Y es casi seguro que haya más formaciones minoritarias que presenten candidaturas.