La negociación colectiva del año 2015 arranca el lunes y se prevé corta pero intensa. A falta de grandes convenios por negociar, todas las miradas están puestas en los aumentos salariales que se puedan conseguir para los trabajadores a los que les toca revisión de sus condiciones laborales. Los sindicatos han marcado el 2015 como año en el que empezar a dejar atrás la moderación salarial, algo que, de llegar, lo haría después de años de congelaciones y reducciones de sueldo para buena parte de los trabajadores. Los empresarios, por su parte, abogan por esperar como poco hasta el próximo ejercicio porque, dicen, "estamos con el agua al cuello".
José María Esbec, presidente de CEOE-Cepyme Zamora, asegura que los empresarios "somos conscientes" de las dificultades que atraviesan muchos trabajadores. Aunque Esbec asegura que "nos gustaría subir sueldos", añade que "en la situación actual esto es francamente complicado". El máximo representante de la patronal zamorana pone el foco en las administraciones, a las que pide una "rebaja de impuestos y cargas económicas" para "poder trasladar esa mejora de condiciones a los trabajadores". Esbec asegura que "si tuviéramos que pagar menos impuestos seríamos capaces de contratar a más personal y de aumentar sueldos, lo que mejoraría el poder adquisitivo" de los asalariados.
La visión de los sindicatos es radicalmente distinta. Manuel Prieto, secretario provincial de CC OO, asegura que "tenemos que garantizar que no se pierda poder adquisitivo". Aunque el IPC está en términos negativos, Comisiones aboga por recuperar "parte de las subidas que se han dejado de realizar durante los últimos años". Conscientes de la "situación real", los sindicatos aseguran que "no vamos a pedir aumentos del 5% para todos los trabajadores", pero inciden en que "los empleados de las clases más bajas tienen sueldos de subsistencia".
En 2015 tendrán que negociarse el convenio de industrias de la madera y el de panaderías, aunque también quedan por cerrarse -pues la negociación no ha terminado en 2014- limpieza de edificios y locales, pastelerías y vinos, cervezas y bebidas alcohólicas. En total, solo estos cinco acuerdos afectan a 2.861 trabajadores de la provincia repartidos entre 276 empresas, según la documentación facilitada por Comisiones Obreras.
Además, deben actualizarse más de una decena de convenios, un "trámite" pues, a grandes rasgos, vienen marcados desde instancias superiores. Entre los más importantes por número de trabajadores afectados está el de la construcción, con 6.500 empleados, según confirmaron ayer desde el sindicato CC OO en Zamora.
