Entra un nuevo año y, como cada primero de enero, es hora de analizar los cambios fiscales. Este año trae novedades sustanciales en este sentido, novedades que son además buenas para los contribuyentes. 2015 no ha querido ser menos y, como suele suceder en año electoral, las instituciones han querido dar un respiro a los ciudadanos. Después de años de recortes, agresivos en según qué casos, los ciudadanos tendrán, a partir de la próxima nómina, un sueldo neto más alto.

Los primeros que notarán los beneficios serán los 53.000 zamoranos con sueldos inferiores a 32.000 euros anuales. La reforma fiscal del Ministerio de Hacienda hará que estos contribuyentes paguen menos impuestos este año que hace tres, al menos en lo referente a IRPF. Mención especial para los que ingresan 12.000 euros o menos, que no tienen obligación de rendir cuentas al Estado en concepto de impuesto de la renta. La reforma fiscal de Hacienda, que llegará en dos partes -una este año y otra en 2016-, acabará por rebajar los impuestos a todos los trabajadores. Sin embargo, los que tengan sueldos brutos mayores a 32.000 euros todavía tendrán que esperar unos meses para notar todos los beneficios fiscales.

Hacienda ha querido poner ejemplos que hagan más entendibles las novedades. Un asalariado sin hijos con ingresos de 25.000 euros brutos al año pagará 3.693 euros de IRPF este año y 3.535 el próximo ejercicio. La cantidad a satisfacer en 2015 es 331 euros inferior a la que se ha tenido que pagar en 2014. Otro ejemplo. Un autónomo sin hijos que presente declaración individual y obtenga un rendimiento de 40.000 euros deberá pagar al fisco 9.936 euros en 2015 y 9.447 en 2016. Este año ha tenido que pagar 10.495 euros.

La Junta no ha querido perder el paso y también anunció novedades en el IRPF. La retención baja a partir de este mes al 10% para los primeros 12.450 euros de renta, algo que se aplicará en el tramo autonómico del impuesto. En este segmento de renta se encuadran alrededor de la mitad de los contribuyentes zamoranos, según los datos del Ministerio de Hacienda. En términos regionales, en lugar del 12% vigente hasta el 31 de diciembre pasado, en 2015 se aplicará un tipo mínimo del 10% que supone un ahorro del 16,7%. A mayor renta menor será el ahorro, algo que se encuadra en los planes de progresividad de la Junta. La rebaja se limitará a poco más del 3% para quienes declaren más de 53.407 euros. El gobierno regional espera que esta medida relance el consumo al contribuir a que haya más dinero en el bolsillo de los ciudadanos. A diferencia de lo que ocurre con la reforma estatal, la autonómica se aplicará totalmente en 2015.