Lentejas rojas, amaranto, sobrasada elaborada por productos vegetales, bolsas bio para los bocadillos, pescados criados en piscifactorías con agua limpia, bebida de arroz cultivado de manera ecológica, aperitivos a base de remolacha, múltiples chocolates sin pasar por alto los elementos de bioconstrucción, concentrados en la primera parte del reciento, los vinos, los quesos, los aceites, tanto de oliva como de girasol, las verduras, frutas y hortalizas suponen algunos de los productos que configuran el extenso abanico ofertado al consumidor en un centenar de expositores presentes en Ecocultura, en Ifeza hasta hoy a las 21.00 horas.

"Me gusta que en esta edición se haya incrementado la presencia de puestos con productos de cosmética", aprecia una zamorana habitual de Ecocultura. "Los precios son más altos que los productos tradicionales, pero la calidad es excelente", comenta Carmen Martín con una mano puesta en un carro de la compra que empleará para transportar las garrafas de aceite que este año adquirirá a un nuevo distribuidor porque a quien desde hace más de un lustro compraba el oro líquido "no ha venido". "El precio no es una referencia, sino la calidad", subraya Pablo Ayala que se lleva a su casa cerveza bio. "Tenía ganas de probarla y ¡no será lo único que compre!", sentencia, mientras que otra zamorana enfatiza que "la calidad es lo que nos tiene que mover al consumidor porque con una magdalena ecológica te sacias o con estas verduras cocinadas porque no tienen tanta agua".

Cosmética ecológica

La calidad de los cosméticos naturales certificados animó a la zamorana Elena Paniagua a poner en marcha su propio establecimiento en la ciudad y a debutar en esta edición en la feria. "La cosmética ecológica no tiene nada que ver con la convencional" y para evitar engaños apunta que "tenemos que mirar con detenimiento los ingredientes". "La cosmética bio es un ámbito muy desconocido. La piel es muy importante en nuestro cuerpo y tenemos que cuidarla con productos naturales igual que cuidamos la ingesta de alimentos". Su compañera de gremio venida desde Granada, Rosa García, se animó a acudir a Zamora por "el prestigio de la feria". "La organización es muy buena, aunque la promoción a través de las redes sociales se ha dejado para última hora". Esta mujer echa en falta la presencia de más público, "pues nos había dicho que asistía mucha más gente y hasta la tarde ha estado flojo". Esta misma opinión la muestra Jordi Mas que participa por primera vez "para abrir mercado" y que alaba "el gran cuidado que se tiene los detalles".

"Me está gustando mucho porque los puestos no están aglomerados, están muy colocados, aunque la referencia que yo tengo es Biocultura de Madrid", explica María Pérez, quien apunta que "quizá la pega que observo es que la música está alta", comenta esta mujer que ha venido expresamente de la capital de España para conocer la feria "de la que he oído hablar mucho".

Las actividades de educación ambiental, pensadas para niños de 3 a 12 años, talleres de tintura, de aceites y linimentos, de infusiones o jarabes, entre otros, impartidos por Ana González-Garzo y Augusto Krause, que exhiben sus herbarios, prosiguen a lo largo de la jornada de hoy, hasta las 21.00 horas. Quienes quieran conocer esta edición de Ecocultura pueden desplazarse en autobús gratuito con salida en la Marina a partir de las 10.45 horas, con frecuencia de media hora, y regreso, el último desde Ifeza, a las 21.30 horas.