El nuevo Impuesto de la Renta de las Personas Físicas, que empezará a notarse en los bolsillos de los zamoranos ya en el mes de enero, beneficiará, de entrada, a la mayor parte de los trabajadores de la provincia. La modificación de tramos, mínimos personales, tipos o deducciones supondrán, de entrada, que más de 53.000 contribuyentes de la provincia tengan un sueldo neto más alto a partir del próximo año. Se trata de todos aquellos con sueldos inferiores a los 32.000 euros brutos anuales.

Según el Gobierno, serán los trabajadores con menor sueldo los que antes noten las novedades fiscales aprobadas el pasado viernes en el último Consejo de Ministros del curso político. La novedad es, de entrada, importante para todos aquellos que ingresan menos de 12.000 euros al año. Aunque buena parte de estos contribuyentes estaban ya exentos de cotizar por el IRPF la cuota actual, de 275 euros, se reducirá a cero a partir del año próximo. Este grupo de trabajadores paga al fisco, solo en concepto de Impuesto de la Renta de las Personas Físicas, unos veinte euros más que en 2011, al inicio de la legislatura. Ahora, la bajada será importante para aquellos obligados a cotizar.

La rebaja media en Zamora, teniendo en cuenta que según los datos del informe "Mercado de Trabajo y Pensiones de las Fuentes Tributarias" -relativo al año pasado y que publica el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas- el sueldo medio en la provincia es de 15.946 euros anuales, ascenderá aproximadamente a doscientos euros al año en el 2015 y trescientos en el 2016, a lo que habría que sumar otros incentivos. Un contribuyente con un sueldo bruto de 15.000 euros pagaba en 2011 más de 1.430 euros al año en concepto de IRPF. En 2014 la cuantía se ha elevado hasta los 1.480 aproximadamente, pero descenderá a 1.200 euros en 2015 y a 1.140 en el 2016.

Lo que sí es cierto es que todos los contribuyentes, sin excepción alguna, pagarán menos IRPF en 2015 que este año. Sin embargo, cuando acabe la actual legislatura -el año que viene- habrá un significativo número de contribuyentes, los que más ganan, que pagarán aun más impuestos que cuando Mariano Rajoy llegó a la Moncloa. Ya pasadas las elecciones, en 2016, estos asalariados (con sueldos de más de 32.000 euros al año) verán como pagan menos IRPF que en 2011. Las únicas personas que pagarán también más en 2016 que en 2011 son las que ganen más de 95.000 euros al año, muy pocas en Zamora.

De esta manera Rajoy dejará un IRPF ligeramente superior para las rentas muy altas que el que se encontró al tomar posesión de su cargo. El tipo máximo se situará en el 45%, el mismo que al inicio de la legislatura, pero empezará a aplicarse a partir de los 60.000 euros anuales y no de los 175.000, tal como lo dejó Zapatero. Los salarios más bajos se beneficiarán más. Un contribuyente con un sueldo de unos 15.000 euros anuales, la media de Zamora, verá como su IRPF se reduce en una quinta parte.

De otro lado, la reforma fiscal que finalmente ha planteado el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas ofrece cambios con respecto al proyecto inicial. La obligación de tributar por la indemnización por despido, algo que en principio iba a afectar a todos los contribuyentes que fueran despedidos y tuvieran sueldos superiores a 2.000 euros mensuales, ha sido finalmente eliminada. La norma indica que tributarán por esta cuestión aquellas personas que sean despedidas y que reciban más de 180.000 euros. Así las cosas, si con el proyecto inicial este punto tenía una influencia escasa en la provincia -los sueldos son por lo general más bajos que esos 2.000 euros al mes- con la modificación su impacto será prácticamente inexistente.

En lo referencia a las rentas de alquiler se mantienen las deducciones de hasta el 60% para los propietarios del inmueble. Los inquilinos, en contra, verán como la deducción -que podía alcanzar los 900 euros anuales- desaparece en los contratos firmados a partir del próximo primero de enero.