El código sobre cómo debe ser el atuendo de los altos funcionarios del Ministerio de Justicia, incluso de los funcionarios, está implícito, «es de sentido común ir vestido con el mínimo decoro», declara uno de los secretarios judiciales de los juzgados de Zamora consultado por este diario. No existe una norma escrita al respecto y, en cualquier caso, «lo importante es la función que desempeñamos y si se hace bien o mal», el resto «es una falta de respeto hacia todos los secretarios judiciales por parte del Ministerio». Estos funcionarios recuerdan que «el 80% del trabajo de los juzgados lo llevan los secretarios», ya que las sucesivas reformas del Poder Judicial les ha atribuido más competencias. Subrayan que controlan la tramitación de todo el procedimiento judicial.

El anteproyecto de Ley del Poder Judicial, concluyen, «es una clara muestra de que tanto el Ministerio como el secretario general han faltado a su palabra» en relación a las condiciones laborales de este alto funcionariado, ya que, entre otras reivindicaciones, «siguen sin consolidar la tercera categoría». Por lo que respecta a las retribuciones, «seguimos teniendo solo las básicas de los jueces y el resto de complementos muy minorados, como antes de la reforma», denuncia la Unión Profesional de Secretarios Judiciales.