Quién mejor que Jesús Hilario Tundidor, poeta zamorano en activo y figura clave de este género, para introducir la musicalidad de los versos y las rimas en el Campus Viriato. Con esta idea sobre la mesa, y con la intención de dar a conocer a los jóvenes la obra de este escritor, desde la universidad han querido llegar más allá de la charla que ayer impartió Tundidor en la universidad.

El poeta llegó a su Zamora natal para presentar su libro «La fertilidad de los vocablos. Antología selectiva», dentro del Club de Lectura que impulsa el Campus Viriato de la capital. Pero lo que en principio estaba pensado como un dar y un impartir, se convirtió en un recibir y en un compartir.

Por sorpresa, para que el poeta no sospechara lo que para él estaba preparado, varios profesores del campus organizaron una exposición que reúne todas las obras del zamorano prestadas para la ocasión por la Biblioteca Pública de la capital, además de una recopilación de los últimos artículos en prensa que hacen referencia al artista, fotografías del homenaje que le realizó la Fundación Camino de la Lengua Castellana y cuatro retratos trazados en pintura japonesa, elaborados para la ocasión por el también artista y profesor de Magisterio del campus Miguel Elías.

Precisamente Elías es, además de amigo, quien ha realizado las ilustraciones de la antología de Tundidor, además de para otra obra que reúne el trabajo de varios poetas. Un conocimiento de su vida y de su obra que le confiere la potestad necesaria para sacar adelante un homenaje que ha sorprendido al poeta.

Pero no solo entre letras y trazos se resolvió el homenaje, que contó con un sonoro añadido: el estreno de una obra de violonchelo creada para un poema de Jesús Hilario Tundidor.

El profesor Pedro Hernández Garriga, muy vinculado a la poesía y nieto de un buen amigo de Hilario, interpretó la pieza que compuso inspirado por unos versos del artista.

Saldar una deuda pendiente de Zamora con el poeta al que vio nacer es el objetivo de esta mirada sobre la obra de Tundidor, que se puede visitar en el hall de la Escuela de Magisterio.

La poesía como elemento de aprendizaje, pero también como medio para que tanto alumnos como ciudadanos se acerquen a sus autores, los de su tierra, los que han nacido en el mismo lugar y que les pueden emocionar a través de sus obras.