La manera de vivir de finales de los años 50 está inmortalizada en las cientos de fotografías que realizó Luis Cortés. Una selección de ese amplio trabajo, en depósito en la Filmoteca de Castilla y León, se exhibe desde ayer en la sala de exposiciones del Archivo Histórico Provincial en la muestra «Luis Cortés, fotógrafo y cineasta» que reúne 70 imágenes en blanco y negro.
Con su cámara, tal y como aparece en una de las imágenes iniciales de la muestra, este filólogo, investigador de las artes populares e historiador del arte, nacido en Murcia pero que pasó su niñez y juventud en Zamora y Salamanca, captó el día a día en la tierra castellana, entre 1956 y 1965, a través de oficios ya desaparecidos como las lavanderas, un labriego trillando o los tratantes en feria de ganado sin pasar por alto un pescador con sus aperos tradicionales, unos gitanos que hacían cestos a la orilla del Tormes o bien un gallo junto al puente romano de Salamanca, ciudad cuya vida universitaria plasma en la escalera del Palacio de Anaya.
La Plaza Mayor salmantina la fotografió a través de los cristales de varios de establecimientos emblemáticos, como el Edelweiss, o mediante la imagen reflejada en unas gafas de sol de una mujer. Los medallones del espacio urbano, que estudió en profundidad Luis Cortés, merecen un apartado en la muestra. «En sus imágenes establece una comparación del león que aparece en uno con el león del circo o del caballo esculpido con el caballo de la feria», señala el director del Archivo Histórico, Florián Ferrero, quien añade: «Son imágenes deliciosas que nos retrotraen a hace más de 50 años y hay que tener muy presente que están hechas con una cámara réflex», explica el director del Archivo Histórico Provincial de Zamora, Florián Ferrero, quien estuvo acompañado en la inauguración, entre otros, por el jefe del servicio de Archivos y Bibliotecas, Carlos Travesí de Diego o la jefa del servicio territorial de Cultura, Pilar Alonso.
Luis Cortes, que ejerció como docente de la Universidad de Salamanca, fijó el objetivo de su cámara también en elementos de arte pastoril, piezas que coleccionó y que ahora se exhiben en el Museo Etnográfico. Amante de la vida al aire libre y ornitólogo aficionado inmortalizó paisajes de la sierra salmantina y de la alta Sanabria. Estas imágenes, de gran fuerza plástica, comparten pared con imágenes de cigüeñas y garzas así como con retratos familiares.
La muestra fotográfica se complementa con seis audiovisuales realizados por el estudioso en la misma época que las instantáneas. «Van en la línea de las imágenes expuestas. La última parte de la muestra cuenta con imágenes sobre pájaros y las aves centran uno de los trabajos que se proyectan, en otro aparecen los pueblos de la montaña o en otro sus gentes», enumera el director del Archivo. «Sus piezas audiovisuales son, sobre todo, de una importancia enorme desde el punto de vista paisajístico y etnográfico porque nos ofrecen la posibilidad, por ejemplo, de ver a una lavandera lavando», subraya Florián Ferrero.
Para el jefe del servicio de Archivos y Bibliotecas, Carlos Travesí de Diego, se trata de «documentos impresionantes de cómo eran Zamora y Salamanca, pero en general, Castilla y León hace más de 50 años». «Son unas fotografías de una belleza que van a sorprender por la luminosidad del blanco y negro así como su fuerza. Incluso algunas de ellas parecen obras abstractas y luego hay otras que muestran maneras de vida y oficios que forman parte de nuestro legado cultural». «Es una exposición en la que se puede hacer un viaje al pasado en un marco tan bello como es el Archivo Histórico Provincial de Zamora».
La muestra «Luis Cortes, fotógrafo y cineasta», perteneciente al programa de la Junta de Castilla y León «Alacarta», se podrá visitar de lunes a viernes desde las 09.00 hasta las 14.00 horas y, además, los lunes y martes de 16.00 a 19.30 horas hasta el 25 de octubre.
