-¿Cómo ve el panorama literario actual en el que están desaparecido muchas editoriales pequeñas e independientes y las grandes publican menos títulos?

-Lo veo, como todo, hecho un desastre. También en esto hubo un tiempo en que vivíamos por encima de nuestras posibilidades. Se publicaba mucho, se pagaban grandes anticipos, no había ningún criterio literario? Ahora la burbuja editorial ha explotado y las cosas están como están. Pero los verdaderos escritores escriben sin tener en cuenta las circunstancias del mercado editorial y por encima de cualquier consideración que no sea la de escribir algo digno de leerse y publicarse.

-¿El futuro está en la edición a través de la red?

-Yo diría que eso ya es el presente, la hovela está en formato digital. El futuro está, probablemente, en Alemania o en China o tal vez en Marte. No lo sé.

-¿En qué está trabajando en este momento, ensayo, novela o teatro?.?

-Aparte de algún ensayo académico estoy preparando una nueva novela histórica. Nada que ver con Fernando de Rojas. La sitúo en una época algo posterior. Será una novela itinerante y con una amplia cronología, y no centrada en un lugar y en unos pocos días como las que he escrito hasta ahora. El narrador, además, será una figura histórica que participa o es testigo de los hechos que cuenta.

-¿Escribirá alguna una novela negra ambienta en Zamora?

-Sí, sigo con el personaje de mi nueva novela. Me gustaría que investigara un caso trágico que quedó sin resolver en los años cincuenta en Zamora. Ya me he documentado sobre ello. Ahora solo falta que, en efecto, este personaje y la novela en la que aparece sean bien recibidos por los lectores, que en cierto modo son los que tienen la última palabra.