Cámara de Comercio de Zamora, CEOE-Cepyme, Caja Rural y Cámara de Propiedad Urbana presentaron ayer un estudio realizado por los profesores José Ignacio Sánchez Macías y Fernando Rodríguez López, del Departamento de Economía Aplicada de la Universidad de Salamanca. «Una necesidad», según destaco Manuel Vidal, presidente de la Cámara de Comercio, ahora que Zamora está a las puertas de la alta velocidad ferroviaria.

El estudio propone varias medidas a llevar a cabo dentro de un plan de acción que permitiría a Zamora aprovechar todas las oportunidades que traerá la llegada del AVE. Ambos autores destacaron, que aunque la labor de las instituciones es importante de cara a desarrollar estas actuaciones, «es el tejido empresarial y la propia sociedad» zamorana los que deben actuar. «Zamora debe tener claro hacia donde va a ir en el siglo XXI», apunta Sánchez Macías.

A corto plazo, los investigadores proponen dinamizar el elemento comercial de la ciudad. «El AVE es muy importante para aquellos sectores que pueden evolucionar más rápidamente, como por ejemplo el turismo o el comercio», destacan los autores del estudio. Rodríguez, por su parte, llamó a los zamoranos a «aprovechar la posición estratégica de la ciudad». «Lo más importante es saber aprovechar la llegada del AVE para atraer actividad económica y que no suponga una puerta de salida». Es necesario, según el estudio, «proyectar una nueva imagen de Zamora, que lejos de renunciar a los valores tradicionales vinculados a la calidad de vida y riqueza del patrimonio histórico, permita identificar a la ciudad con el dinamismo y la innovación».

La posibilidad de promocionar Zamora como ciudad de congresos y ferias también ha sido estudiada ya que, según los autores del libro, «es una de las modalidades de negocio más rentables». «Es necesario combinar y coordinar la oferta de espacios y servicios propios del turismo de congresos, ferias y reuniones», indican los autores en el estudio.

Aparte del propio Manuel Vidal, al acto de presentación del informe acudieron José María Esbec, de CEOE-Cepyme, Cipriano García, de Caja Rural y Manuel Rodríguez, de la Cámara de Propiedad Urbana. Todos ellos destacaron los «esfuerzos» necesarios por parte de «instituciones y tejido empresarial» para que Zamora viva un «empujón» con la llegada del AVE. Además, estuvo presente Félix Larrosa, consejero delegado del Centro de Negocios y Convenciones de Lleida, que explicó los cambios que ha vivido su ciudad en los diez últimos años como consecuencia directa de la llegada del AVE. Sobre la posibilidad de que Zamora se convierta en una «ciudad dormitorio», Larrosa indicó que «la experiencia nuestra dice que eso no va a pasar», por lo que el catalán prevé el gran cambio en lo referente al número de personas que pasará por la provincia. «En diez años han llegado a Lleida cuatro millones de viajeros en AVE», destacó.

En representación de la Junta de Castilla y León acudió Antonio Silván, consejero de Fomento, que destacó que el AVE debe ser «una puerta de entrada de personas, de ideas, de proyectos y de dinamismo económico». «La provincia», aseguró Silván, «está a las puertas de un gran cambio y aprovecharlo nos compete a todos: instituciones, tejido empresarial y sociedad». El consejero indicó que «ahora la distancia no se mide en kilómetros, se mide en tiempo», y auguró «un gran avance para la ciudad» por el hecho de que se encontrará a poco más de una hora de la capital o «mejor dicho, que los madrileños estarán a poco más de una hora de Zamora».

Los investigadores, no obstante, indican que este estudio es solo «el primer paso» y llaman a empresas e instituciones «a trazar una hoja de ruta de los objetivos a cumplir».