Ante las quejas acumuladas por los usuarios, el concejal de Prestación y Gestión de Servicios, Francisco Javier González, reprocha a Aurza que «siguiera vendiendo abonos cuando ya habíamos anunciado la puesta en marcha del nuevo servicio», a la vez que recrimina a la antigua concesionaria «que no avisara con más antelación». En cualquier caso, el edil anuncia que «los usuarios tienen un mes de transición para solicitar sus nuevos abonos» que, en el caso de los de personas de la tercera edad, requerirá un depósito de tres euros. Con respecto a los abonos de jóvenes, el concejal ha dado orden a la Concejalía de Servicios Sociales «para que tramite las tarjetas para los menores de 30 años», que tiene carácter independiente a la posesión de la tarjeta joven, tal y como ocurría con la anterior concesionaria. No obstante, el edil pide «comprensión» y achaca estos problema al «actual periodo de transición».