Pedro García, presidente de Jesús del Vía Crucis, es la persona en la que Antonio Martín Alén ha confiado las tareas de portavocía, una nueva función que el responsable de la Junta pro Semana Santa ya anunció el mismo día de su investidura. «No volveré a hablar con los medios, habrá un portavoz», aseveró en aquella ocasión.

De hecho, Pedro García fue uno de los nombres que las cofradías barajaron como alternativa a Chano Lorenzo en la presidencia en el primer intento tras meses de nombrar un nuevo responsable del órgano gestor. El archivero renunció a la propuesta, pero ha sido uno de los presidentes que más ha trabajado para buscar soluciones a la crisis de la Junta.

Asimismo, García Álvarez ha ejercido como portavoz de la primera de las gestoras que se nombraron en el periodo de transición que abrió la moción de censura a González Poza. El responsable del Vía Crucis fue uno de los más críticos con las «formas» y los «métodos» en la gestión económica del equipo anterior.

Precisamente, uno de los problemas más contestados de González Poza fueron las formas utilizadas para reclamar subvenciones pendientes a las instituciones públicas, particularmente al Ayuntamiento, con quien tuvo serias disputas hasta el punto de dejar de celebrar la presentación del cartel oficial de la Semana Santa en el salón de plenos municipal, al juzgar su apoyo insuficiente.