El grupo Popular en la Diputación de Zamora repartió ayer a los miembros de la oposición el proyecto de presupuestos del organismo provincial para el año que viene, un documento que presenta un superávit de 2,1 millones de euros según explicó Aurelio Tomás, vicepresidente del organismo, a la salida de la reunión.

El capítulo de ingresos de las cuentas de la Diputación será el próximo año «8 millones de euros» superior al del ejercicio anterior y se situará en los 62,32 millones de euros. El aumento, según Tomás, responde a un alza porcentual del 14,47%. Por su parte, el capítulo de ingresos asciende a 60,21 millones, «casi 6 más» que el año pasado, equivalente a un 10,89% más.

En relación a este último punto, Aurelio Tomás explicó que no se ha igualado el capítulo de ingresos con el de gastos porque «el Gobierno central ha fijado un techo de gasto del 1,7%». Si este techo aumenta, se intentará destinar el dinero del superávit a aumentar la inversión, apuntó el vicepresidente.

Tomás destacó que son unas cuentas marcadas «por la difícil situación económica» de la provincia, pero auguró «signos positivos de cara a la recuperación». En los ingresos, que aumentarán después de varios años consecutivos de caídas, destaca la participación del Gobierno con 4 millones de euros en la participación de tributos, 1,9 millones de la Junta para gasto corriente y tratamiento de pacientes psiquiátricos, 2,5 millones incondicionados para transferencias a ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes o 750.000 euros de transferencias de capital del Gobierno Central con cargo al desarrollo rural.

La Diputación prevé una amortización de 6,1 millones de euros correspondiente a préstamos de años anteriores, por lo que se prevé que la deuda pendiente a finales de 2013 llegue 45,6 millones de euros, de los que 33,7 son préstamos de entidades financieras y 11,8 millones de las liquidaciones negativas de los años 2008 y 2009 que se consideran deuda. La reducción de este capítulo, según Tomás, será de «8 millones desde los 53,5 actuales». Por esto, el índice de endeudamiento del organismo será a finales del año que viene del 77,6%, mientras que ahora está cercano al 110%.

El capítulo de ingresos, según el vicepresidente de la Diputación, «va destinado fundamentalmente para las inversiones, tanto directas de la Diputación como para transferencias de capital». En el capítulo de inversiones directas habrá 2 millones para carreteras en la provincia y, de ellos, 1 para el contrato de mantenimiento. Las transferencias de capital a los ayuntamientos pasan de 3,3 a 5,5 millones. El principal aumento de este punto es el Plan Municipal de Obras.