Tienen en común ubicarse en las salas dedicadas a la pintura en el Museo de Zamora y que investigadores tanto de este centro como de otros espacios culturales y universidades han ahondado en su historia para ofrecer detalles sobre su temática o para descubrir su autoría.

Los cuadros «Sagrada Familia con San Juanito», «Fuente monumental» y «Escena en el parque» son tres ejemplos exhibidos en la muestra permanente del Provincial que forman parte de la exposición temporal «Nuevos datos sobre antiguas piezas del Museo de Zamora», confeccionada en el espacio museístico en base a los hallazgos realizados sobre algunas de sus obras. «Son piezas que tienen una excelente calidad sobre las que en los últimos cinco años por casualidad o por el trabajo de los investigadores conocemos más información», indica el conservador del centro, Alberto del Olmo, mientras que la directora del Provincial, Rosario García, subraya que esta exposición supone «una manera de dignificar las obras y darlas a conocer».

«La Sagrada Familia con San Juanito», de mediados del XVI, procede de Tábara y se encuentra en el Museo desde 1960. Su pésimo estado, carcoma y pérdida de pintura muy importante, obligó décadas atrás a la Escuela de Restauración a realizar una reintegración severa. Hasta ahora se especulaba que la autoría de la tabla correspondía a diversas escuelas italianas. Sin embargo un investigador del Prado, Gonzalo Redín, ha trabajado en la pintura manierista toscana y ha profundizado en uno de sus representantes, Michele Tosini. Este estudioso ha localizado una pieza muy similar a «Sagrada Familia con San Juanito» en la colección de la Gallería Pallatina de Florencia. «Si se comparan ambos cuadros el modelo es el mismo, por lo que ahora ha pasado a pensarse que se atribuye al círculo creativo de Tosini» pero «no podemos poder llegar a más conclusiones por la importante restauración que se realizó en los años 80», indican desde el Museo.

La segunda de las piezas sobre la que la que existe más información es «Fuente monumental» o «Jardín rococó», una aparente escena de cortejo sin documentación, pese a proceder del Prado y estar depositada desde los años 40 en la colección del Provincial. Se trata de una obra atribuida finalmente a Francesco Battagliolli, gracias a la labor de Jesús Urrea que en los años 70 delimita el repertorio de este artista intuyendo que algunas obras eran escenografías de ópera. En esta teoría profundiza más Margarita Torrione, una investigadora de la Universidad de Lille, que a partir de un manuscrito del cantante Carlo Broschi, «Farinelli» identifica varias obras de Battaglioli, dos del Museo de la Real Academia de San Fernando y otras dos del Museo de la Ópera Garnier de París, como representaciones de escenas de las óperas «Nitteti», «Didone abbandonata» y «Armida placata».

Este hallazgo lo comparte el experto del Prado, José María Quesada, con el personal del Provincial debido a la similitud de una de obras identificadas con una expuesta en el Museo de Zamora. Así las cosas los técnicos del Provincial trabajan para identificar la escena a través del libreto de la ópera. Tras localizarlo y analizarlo averiguan que el cuadro representa la escena la XII de la parte I de «Armida placata» centrada en «la historia de romances entre Armida, reina de Damasco, y uno de los capitanes de los cruzados que están intentado liberar Jerusalén llamado Reinaldo», precisa el conservador Alberto del Olmo.

Por otro lado, un descubrimiento de personal del Museo de Zamora ha otorgado luz sobre «Escena en el parque en el siglo XVII», de 1866, de Ignacio León y Escosura. Y es que desde el centro se ha podido relacionar este ejemplo con la obra del mismo autor «Un paseo en Aranjuez en tiempo de Felipe IV», presentada en 1864 a la Exposición Nacional de Bellas Artes. El cuadro, de pequeñas dimensiones exhibido en el Provincial, «puede tratarse de un trabajo preparatorio para esa otra obra de mayor formato o también de una pintura de "tableautin" o pintura de casacón, que empieza a generalizarse a mediados del XIX por el nacimiento de la burguesía que precisa formatos pequeños adaptados para sus residencias para que los que el pintor retoma esta temática de especial éxito», indica Alberto del Olmo.

«Nuevos datos para antiguas obras del Museo de Zamora», puede verse hasta el próximo día 2 diciembre en la sala de exposiciones temporal del centro, aunque estas piezas se presentan en la zona de la colección permanente del Provincial.

«Fuente monumental» narra la escena XII de la primera parte de la ópera «Armida plataca» que se representó en 1750 con motivo de una boda de una hermana de Felipe V con el duque de Saboya», indican desde el Provincial. La obra muestra cómo el cruzado Reinaldo se pone a los pies de la reina, Armida, tira sus armas y se descubre para pedirle que libere a uno de sus amigos que está preso.