La reestructuración sanitaria propuesta por la Gerencia Regional de Salud, con la que la provincia de Zamora perderá 23 médicos y 19 enfermeras, fue calificada por UGT como «discriminatoria para el medio rural», ya que «en lugar de implementar profesionales en el ámbito urbano, donde hacen falta, la Gerencia prefiere mandar profesionales del ámbito rural y simplemente suprimir plazas», denunció Jerónimo Cantuche, secretario general de la Federación de Servicios Públicos del sindicato.

«En Zamora no se ha tenido en cuenta para nada la dispersión y el envejecimiento de la población y lo único que hacen con esta medida es abandonar a la provincia a su suerte y ahondar en su decadencia», pronosticó el secretario.

Por este motivo, desde UGT se instó a los alcaldes de la provincia «a que alcen la voz, porque se trata de un atropello a todos los ciudadanos que viven en los pueblos, incluidos ellos mismos», precisó Cantuche.

Con esta medida de la Gerencia Regional de Salud, únicamente en León y Valladolid se crean plazas para profesionales y en Zamora, además, no solo se pierden 42 puestos, sino que no se crea ninguno nuevo, como sí ocurre en otras provincias de la región. «Con esto, muchos profesionales que prestan servicios en el medio rural de Zamora se ven en la obligación de marcharse a otras áreas de salud fuera de la provincia», explicó.

Esta situación también afecta de manera directa a la unidad básica funcional, es decir, el ratio existente entre médicos y enfermeras. «Esa proporción se pierde y generará problemas entre los profesionales, porque no podrán contar entre ellos para apoyarse y, finalmente, serán los usuarios quienes sufran todos estos recortes», recordó Cantuche.

La segunda fase de esta reestructuración se llevará a cabo a partir del 1 de enero de 2013. «La vía que se abre pretende amortizar muchas plazas, ya sea por excedencias, jubilaciones, traslados o simplemente por causa de una nueva organización de las cargas de trabajo, cuando los gestores de Atención Primaria de cada provincia lo estimen oportuno», lamentó Jerónimo Cantuche desde UGT.