Los Bomberos de Zamora vuelven a la carga con nuevas movilizaciones para exigir un convenio que evite «la duplicidad de servicios» entre la provincia y la capital, una cobertura que prestan a pesar de que el acuerdo entre Ayuntamiento y Diputación todavía no está aprobado «aunque sí prácticamente cerrado», reconoce el concejal del área, Jesús Alonso. Según los agentes, su situación laboral actual repercute en «una mala atención tanto a los pueblos, a los que nos vemos obligados a asistir, como a la capital, quien paga realmente el servicio», recuerda el portavoz del gremio, José Luis Gutiérrez. El trabajador asegura que «aunque no queremos crear una alarma social, cada vez se dan más situaciones de este tipo y si pasa algo, no queremos ser los responsables», plantea. En este sentido, el concejal del PP rebate que «en la misma situación se encontrarían si ocurriera más de un incendio en la capital», sopesa. En cualquier caso, los Bomberos de Zamora piden a la alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón, una mesa sectorial para abordar «nuestro problema de falta de medios y personal».

Aunque las negociaciones siguen abiertas, los agentes denuncian que «sólo ha habido encuentros informarles que no han servido para nada» y anuncian que seguirán haciendo acto de presencia en comisiones, juntas de gobierno, plenos o actos públicos del Ayuntamiento «para reivindicar nuestros derechos», tal y como hizo un grupo de ellos ayer a las puertas de la Casa de las Panaderas. Aseguran, además, que «no tenemos órdenes claras de cómo actuar, es más, en algunos casos son contradictorias».

El concejal de Protección Ciudadana justifica que «sin perjuicio de la existencia de un convenio, hay una colaboración entre administraciones para la prestación de un servicio público, en este caso, a raíz de una llamada del 112 donde piden que prestemos una cobertura».

A las protestas llevadas a cabo ayer por los Bomberos se suman las protagonizados por los trabajadores de Zamora Limpia frente a la sede de la empresa. Aseguran que la adjudicataria no ha pagado febrero a su más de centenar de trabajadores y que llevan medio año percibiendo sus salarios fuera de plazo.