La reordenación del mapa de Atención Primaria que iniciará de forma inminente la Consejería de Sanidad aumenta de 754 a 761 el número de tarjetas sanitarias que tendrá que atender cada médico de familia de la provincia. En el caso de las enfermeras, pasarán a atender cada una 883 pacientes en lugar de 874.

Esta reorganización también obligará, en una primera fase, a cambiar de zona a cinco médicos y dos enfermeras en la provincia. La previsión es que uno de los facultativos será trasladado al centros de Parada del Molino, dos al centro de Puerta Nueva y otros dos al Virgen de la Concha, mientras una enfermera llegará al centro de Puerta Nueva y otra al Virgen de la Concha. En principio, la reordenación de las plantillas no supondrá la modificación de zonas básicas y áreas de salud, ni implicará para los pacientes cambios de centro de salud. Además, para determinar la carga asistencial de los profesionales se han tenido en cuenta criterios como la población de la demarcación por tramos de edad; medio en que se ubica la demarcación (rural, urbano o semiurbano), así como el tamaño de las localidades, número de consultorios y tiempo de desplazamiento para acceder a los consultorios locales. Además se respetará la existencia, como mínimo, de tres médicos por puesto de área.