La Cámara de Comercio e Industria prevé abrir el nuevo vivero de empresas tecnológicas después del verano. El nuevo espacio para emprendedores, en fase de obras, recibirá una financiación de Caja Rural que ascenderá a 50.000 euros durante los próximos cinco años. El importe se destinará a la adquisición del equipamiento necesario para la puesta en marcha de las instalaciones así como para brindar apoyo económico y asesoramiento a los jóvenes que inicien nuevos negocios.

Hasta el momento, el organismo cameral ha recibido una decena de solicitudes de personas interesadas en ocupar algunos de los quince despachos que ofrecerán los nuevos locales. Las peticiones serán sometidas a un proceso de selección en el que se dará prioridad a los proyectos empresariales relacionados tanto con las nuevas tecnologías, como con las energías renovables, tanto desde el punto de vista de la promoción, como de la instalación y mantenimiento. En concreto, la previsión es concluir las obras de reforma que se realizan en los locales, que se ubican en el número 11 de la avenida de la Feria, a finales de julio para recibir a los primeros emprendedores en septiembre.

El presidente del organismo cameral, Manuel Vidal, asegura que la aportación económica de Caja Rural «se agradece el doble en el momento complicado en el que nos encontramos» en referencia a la conversión en voluntario del carácter obligatorio de las cuotas que hasta ahora pagaban las empresas de la provincia. Aún así, asegura que «la continuidad de la Cámara de Comercio está asegurada» y admite que «el futuro de la Cámara va a ser diferente al que hasta ahora ha tenido». En este sentido adelantó la posibilidad de que las instituciones camerales puedan asumir nuevas prestaciones de servicios a través de acuerdos con el Gobierno central y autonómico que se encuentran en estudio.

Respecto a la situación general del empresariado, Vidal afirma que el acceso a la financiación sigue siendo uno de los principales problemas de los negocios. Según sostiene «la mitad de los empresarios que piden empresas todavía se encuentran con las puertas cerradas».

Por su lado, el director general de Caja Rural, Cipriano García, destacó que la concesión de créditos por parte de esta entidad financiera no sólo no ha descendido, sino que «hemos realizado más préstamos en lo que va de año que a finales de 2010». Aún así asegura que la desconfianza y la preocupación causada por la crisis económica ha frenado la iniciativa inversora en la provincia.