Alicia Rojo Parra nació en Zamora pero lleva afincada en Alemania quince años. Viajó al país germano en 1996 para completar su formación y acabó formando allí su familia. Lleva un negocio de arquitectura de interior con su marido y asegura que la situación económica alemana no tiene nada que ver con la española. «Aquí no estamos sufriendo los problemas económicos por los que está atravesando España, es como si la crisis hubiera pasado de largo porque no estamos notando los efectos», según asegura.

Esta zamorana reside en Wiesbaden, una ciudad próxima a Frankfurt, donde ha formado un entorno de amistades que también ha esquivado la crisis. «No conocemos casos de despidos como los que se producen en España», según sostiene. Acerca de la situación española, Alicia Rojo marca diferencias con otros de los países que sufren dificultades económicas, como Grecia, Irlanda o Portugal. «España es un país fuerte dentro de la Unión Europea al que no conviene dejar que se hunda porque supondría el desplome del euro».

En su opinión, «Alemania quiera ayudar a España porque siempre han existido muy buenas relaciones entre ambos países». Además, la zamorana asegura que «los alemanes tienen muy buena imagen de los españoles, siempre se les ha recibido con los brazos abiertos».

En cuanto a la posibilidad de regresar a España en un futuro próximo, Rojo lo descarta por completo. «Vivo muy a gusto en Alemania y no sólo tengo hecha mi vida aquí sino que con todo lo que escuchamos de España tampoco me planteo volver», según explica.