La próxima puesta en marcha de la denominada como autopista del mar se une a la larga lista de motivos que urgen la conclusión del último tramo pendiente de la autovía Ruta de la Plata, el comprendido entre Zamora y Benavente. Los responsables de la naviera GLD-Lines implantarán una línea de transporte marítimo entre Francia y España, entre los puertos de Nantes-Saint Nazaire y el de Gijón, y consideran prioritaria la finalización de la A-66 para disponer de un eje de comunicación unitario para todo el noroeste peninsular.

La compañía naval realizará el primer viaje inaugural entre la costa gala y la española el próximo 9 de septiembre a bordo del buque «Norman Bridge», acondicionado para efectuar tanto transporte de carga rodada como de pasajeros. La intención de los representantes de la compañía es ampliar el volumen de negocio y para ello han iniciado una campaña de captación de clientes a lo largo y ancho de todo el noroeste peninsular y de la Ruta de la Plata. «Tenemos previsto derivar la mercancía desde Extremadura e, incluso, desde Huelva», según las declaraciones recogidas por el periódico La Nueva España a uno los directivos de la compañía, Carlo Tamagni.

La conexión del noroeste peninsular con la nueva autopista del mar ya fue puesta sobre la mesa por las Cámaras de Comercio de Zamora, Salamanca, León y Cáceres en el estudio de viabilidad sobre la reapertura del tren Ruta de la Plata. Dicho documento, encargado para pedir al Ministerio de Fomento que incluya la actuación en el Plan de Infraestructuras de Transporte (PEIT), pone el «punto de mira» en la potenciación del eje ferroviario que discurre entre los puertos de Algeciras y Gijón para el tránsito de mercancías entre África y el Norte de Europa, que permita superar el actual colapso del transporte por carretera.

El objetivo, según explicó a este periódico el propio director del informe, sería captar el tráfico procedente de Marruecos a través del puerto español con más tránsito de mercancías general de contenedores, el de Algeciras, meter los camiones en trenes para cruzar la península de sur a norte y enlazar con el puerto de Gijón, concesionario de la primera «autopista del mar», conectada con Nantes para así llegar directamente a Europa central con un ahorro considerable de tiempo y costes. El mismo sistema funcionaría en sentido contrario, con un movimiento global de 15,6 millones de toneladas, equivalentes a 625.000 camiones al año.

En concreto, el estudio encargado por las Cámaras de Comercio de Zamora, Salamanca, León y Cáceres propone la conexión con el Norte de África y el corazón de Europa mediante los denominados «tráficos en tránsito», basados en una novedosa concepción intermodal que contempla el transporte de mercancías «camión-ferrocarril-barco-camión», también denominado como «autopistas del mar». Esto supondría una alternativa de encaminamiento al paso de frontera actual por Irún en transporte por carretera.

El informe, elaborado por la Consultora Adbayse, calcula que estos tráficos en tránsito, es decir, los que atravesarían el corredor en algún momento sin emplearlo como origen o destino, serían utilizados anualmente para el transporte de 4,7 toneladas, mientras que los tráficos propios, los que afectan directamente al corredor, supondrían el transporte de 10,93 toneladas.

Otra de las opciones aplicables a la nueva línea ferroviaria es el «ferroutage», concepto con el que se denomina a un sistema de transporte de camiones, tanto completos como parciales si sólo incluye las cajas de los vehículos, sobre plataformas ferroviarias. Una alternativa que permitiría eliminar camiones de las carreteras y que asegura la «capiralidad» de este medio. La reapertura del tren Ruta de la Plata pretende constituir una ruta alternativa para descongestionar el nudo ferroviario generado en Madrid.

Las Cámaras de Comercio, apoyadas en este documento, presentaron el denominado «Manifiesto de Salamanca», como una primera piedra para aunar los esfuerzos de las administraciones, colectivos y de la opinión pública con el fin, a corto plazo, de convencer al Ministerio de Fomento -al que harán llegar el estudio- de que incluya la infraestructura en el PEIT.