"Nos desalojaron y salimos rápidamente. En principio no nos dijeron nada, pero después nos informaron que había una furgoneta con sustancias sospechosas y que teníamos que dejar la casa", asegura. "Había Guardia Civil por todas partes y la verdad es que sentimos mucha incertidumbre y miedo", añade Colino, que se fue a la otra vivienda que tienen en Bermillo.