El delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, ha explicado a EFE que los dos presuntos terroristas de ETA que fueron detenidos posteriormente en Portugal en esta operación policial son el hombre que conducía la furgoneta y una mujer que viajaba en un coche lanzadera.

Los arrestos se produjeron en Portugal después de que una patrulla de la Guardia Civil integrada por dos agentes efectuara anoche un control rutinario de vehículos en el casco urbano de Bermillo de Sayago, en la carretera CL-527, en el que se dio el alto al conductor de la furgoneta.

Cuando los agentes iban a abrir el maletero de la furgoneta para ver lo que llevaba en su interior, el conductor aprovechó para escapar y cogió el coche de los agentes de la Guardia Civil, en el que huyó en dirección a Fermoselle (Zamora), desde donde cruzó la frontera de Bemposta antes de ser arrestado ya en Portugal.

La información facilitada por las fuerzas de seguridad españolas a las portuguesas permitió detener posteriormente a una mujer que viajaba en un coche lanzadera que, al igual que la furgoneta, tenía placas de matrícula de Francia.

Los agentes que dieron el alto el furgoneta comprobaron que había explosivos, por lo que fueron desalojados los edificios colindantes al lugar donde quedó aparcado el vehículo y se dio aviso al servicio de desactivación de explosivos Tedax, ante la posibilidad de que se tratara de una furgoneta-trampa que estuviera lista para explotar.

Sin embargo, los especialistas en explosivos de la Guardia Civil descartaron esta posibilidad y recogieron tanto los explosivos como otro material, cuya composición aún no se ha revelado para evitar entorpecer la investigación.

En la actualidad, también se está investigando tanto el tipo de material explosivo como si los dos supuestos terroristas tenían alguna vinculación con los detenidos ayer en Francia.

Los dos arrestados tras el control efectuado en Zamora se encuentran en dependencias policiales de Portugal y aún no han sido puestos a disposición de la autoridad judicial portuguesa.

Alejo ha precisado que la localización de la furgoneta se produjo en un control rutinario de las fuerzas de Seguridad del Estado, por lo que felicitó a los dos agentes que lo efectuaron por los resultados conseguidos, pese a que "lógicamente se debieron dejar las llaves puestas" del coche patrulla y eso pudo facilitar la huida del terrorista.

El delegado del Gobierno en Castilla y León ha indicado que desde el inicio de las pasadas vacaciones navideñas los controles rutinarios han permitido llevar a cabo más de 40.000 identificaciones en la Comunidad autónoma.

Ha destacado además la colaboración del Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil con las fuerzas de seguridad portuguesas, con las que están "en permanente contacto" desde hace años, tanto en la lucha conjunta contra el terrorismo como contra otras formas de criminalidad.