El Juzgado de lo Social tendrá que decidir sobre la extinción de la relación laboral de tres trabajadores de El Heraldo, que piden indemnizaciones de 45 días por año trabajado. Así lo solicitaron los abogados de los empleados en los tres juicios celebrados ayer por la mañana. Otros dos previstos por el cierre de la antigua imprenta-librería se vieron suspendidos, en un caso tras alcanzar uno de los trabajadores un acuerdo con la empresa; en el otro, por la ausencia del letrado. El Juzgado de lo Social proseguirá las vistas, una por cada trabajador, el próximo miércoles.

El empleado que aceptó la oferta de la empresa, Herederos de Arturo Calamita, por despido improcedente recibirá 10.370 euros, cantidad en la que se incluye una indemnización cercana a los 8.000 euros. En los otros tres casos los abogados entienden que el despido es nulo porque hubo un defecto de forma al tratarse de un despido colectivo en el que no se contó con la autoridad laboral ni se tramitó expediente de regulación de empleo cuando la empresa cerró, el 14 de noviembre pasado. Durante la vista oral, los defensores de los trabajadores incidieron en que no había causa para el cierre.

Aunque lo que se dirimía era un asunto laboral, parte de la sesión se vio afectada por los problemas con la herencia de Arturo Calamita ya que, según los distintos abogados de las herederas, «no está aún determinada la propiedad» de El Heraldo. El letrado de la comunidad hereditaria entiende que el Juzgado de lo Social «no puede dictar sentencia en este procedimiento» mientras se esté a la espera del concurso de acreedores en el Juzgado de lo Mercantil y del recurso del expediente de regulación de empleo en el Contencioso Administrativo, además del procedimiento judicial previo en torno a la herencia de Arturo Calamita.

Hasta que se iniciaron los juicios las partes intentaron agotar los últimos momentos de la negociación sin alcanzarse acuerdos por falta de unanimidad.