Aunque sin tener la certeza de que «nos compensará las pérdidas», los estanqueros de la provincia se «conformaron» ayer con la compensación que Hacienda ha anunciado del 0,25% en el margen de beneficios que obtienen en la venta de cada cajetilla de cigarros. Este porcentaje se sumará al 8,5% de ingresos que perciben los estanqueros por cada paquete de tabaco vendido, con lo que esperan poder resarcirse de las pérdidas registradas tras el descenso de precios. Un «incremento de beneficios que puede llegar al 1%, a aplicar desde hoy mismo -por ayer- y hasta el 30 de junio», explicó el presidente de la Asociación de Estanqueros de Zamora, Eliseo Gómez, quien precisó que «el tipo impositivo por cada 1.000 cigarrillos es de unos 55 euros». De este modo, el Gobierno obliga a las tabaqueras a incrementar el precio del tabaco, puesto que «en la cajetilla más barata el impuesto supondrá un gravamen de 1,1 euros». Una disposición que favorece a los dueños de estancos porque obligará a subir el pecio de las marcas si quieren ganar dinero.

Por su parte, Winston les compensará con 50 céntimos por cada cajetilla que tuvieran en stock cuando se produjo la bajada de precios. Del resto de marcas no han tenido noticias y el servicio jurídico de la Asociación Nacional continúa estudiando la posibilidad de demandar a las empresas tabaqueras para que les indemnicen de algún modo. Los 40 estanqueros reunidos ayer en asamblea en la capital «no están muy contentos» porque esperaban escuchar que les abonarían las pérdidas provocadas con el descenso imprevisto de precios.

No obstante, Eliseo Gómez, expresó ayer «cierta satisfacción» del sector zamorano por las noticias llegadas de Madrid respecto de las medidas gubernativas, «cualquiera que sea comprensivo tiene que admitir esta solución porque la huelga es imposible», dado el carácter administrativo del negocio, que les impide dejar sin suministro de tabaco a la población.