José Luis Concepción se sumó ayer a la reivindicación de un segundo Juzgado de lo Social, de modo que la Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia que preside «elevará la solicitud al Consejo General del Poder Judicial» (CGPJ). Concepción recogía así la reiterada solicitud de la titular del único órgano de lo Social existente en la provincia y la petición expuesta por el Colegio de Abogados de Zamora.

Concepción subrayaba ayer que «es precisa la creación de otra jurisdicción social porque hay una sobrecarga» por el importante número de asuntos que recibe cada el único Juzgado de Zamora. Al tiempo, ensalzaba «la rapidez en las resoluciones y la calidad de las sentencias en la Audiencia Provincial y en casi la totalidad de los juzgados». Una aseveración expresada por los abogados y procuradores en los sendos encuentros mantenidos ayer con el presidente del TSJ, quien se reunió con todos los colectivos de la Administración de Justicia para conocer las carencias.

José Luis Concepción tampoco tuvo reparos en calificar como «pozo negro» la situación de la sala de lo Contencioso de Valladolid, aunque dijo «esperar que dentro de dos años podamos hablar de eficacia de resoluciones». La reflexión del presidente del TSJ se produjo tras la pregunta sobre la posible agilización de los asuntos para evitar las dificultades en la ejecución de las sentencias, al dictarse varios años después de presentado el recurso, como ha ocurrido con el Plan General de Ordenación Urbana de Zamora. El máximo representante del Alto Tribunal de Castilla y León, que celebró ayer en Zamora la comisión permanente de la sala de Gobierno del TSJ, puntualizó que «desde hace un año existe un nuevo presidente de sala y los casos pendientes han pasado de 13.000 a 1.500», con ayuda de jueces de apoyo.

Por lo que respecta a la precariedad en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de la capital por la vacante del gestor procesal y el cese del magistrado hace dos meses, Concepción informó de que el TSJ «instó al Ministerio de Justicia a la solución de estos problemas y se dará», máxime cuando a finales de este mes está previsto que tome posesión la nueva titular.

Sobre este problema intercambió opiniones con el Colegio de Procuradores, que remitió precisamente al TSJ una queja formal por la situación de "atasco" que se ha producido en el Juzgado número 1, manifestó el decano, Juan Manuel Gago, quien, sin embargo, destacó «el funcionamiento óptimo de los juzgados en general y de la Audiencia».

Por su parte el decano del Colegio de Abogados, Ignacio Esbec, solicitó «la agilización en el nombramiento de jueces para cubrir las vacantes de los titulares» y evitar así retrasos en los procedimientos.

En cuanto a la extensión a Zamora de la experiencia piloto de la Oficina Judicial, precisó que «en dos o tres años» se implantará en esta capital y en el resto de la región, una vez que el Ministerio de Justicia ha decidido desarrollar el proyecto en once ciudades durante este año, una de ellas Burgos. Con posterioridad pondrá en marcha «una segunda etapa en la que tampoco está previsto que Zamora se vea afectada».

Finalmente, apuntó que para Castilla y León el Ministerio prevé la creación de sólo 4 nuevas plazas judiciales: dos juzgados de Vigilancia Penitenciaria (uno en Burgos y otro en Salamanca); otro de Violencia de Género en Valladolid; y una nueva plaza de magistrado para la Audiencia de León.

Los forenses piden más espacio para atender mejor a los ciudadanos

Entre las peticiones de los colectivos de la Administración de Justicia de Zamora al presidente del TSJ no podía faltar la "vieja" demanda del Instituto de Medicina Legal: «básicamente, más espacio», indicaba gráficamente su subdirector, Antonio González. De ello tomó buena nota José Luis Concepción, que prometió, tras visitar personalmente las instalaciones, exponer el problema y apoyar la petición.

«Como solución urgente», se precisa de «dos despachos más para los médicos forenses; un lugar digno para las dos funcionarias de la Clínica; y una sala de espera más amplia». La solución está fuera del Palacio de Justicia, puesto que en la planta baja parece no haber metros disponibles y los pisos superiores crearían problemas de accesibilidad. González añade que «más adelante precisaríamos una sala de reuniones para los forenses y un archivo», ahora consistente en un armario pequeño en mitad del estrecho pasillo que da acceso a los dos únicos despachos de los cinco forenses que trabajan para los juzgados de capital y provincia. Espacios tan pequeños que «cuando hay que reconocer a un enfermo en silla de ruedas, tenemos que sacar las sillas y mover la mesa del despacho para poder trasladarle a la camilla».