«Esto es una muestra de apoyo, de manera cívica, al botellón y al presidente del Consejo de la Juventud, la gente ha dicho "vamos a San Martín por toda la movida que se ha montado estos días"; y era impresionante la cantidad de gente», apuntaba uno de los jóvenes que llegó pasadas las 23.30 horas al lugar designado para el multitudinario encuentro, al parque de San Martín. Allí se concentraron más de medio millar de jóvenes, de entre 17 y 26 años, con el único propósito de «demostrar a los ciudadanos que se puede hacer botellón sin molestar a nadie ni destrozar nada», explicaban uno de los asistentes, que pidió preservar su identidad. Aunque reconocen que «siempre hay descontrolados, cuatro imbéciles, que tiran vasos o botellas contra la pared de la muralla, la mayoría sólo buscamos tomarnos unas copas y conversar. Igual que estamos haciendo hoy». Lo cierto es que, a decir de los asistentes, la velada, que concluyó pasadas las 4.00 de la madrugada de ayer, transcurrió en un ambiente de camaradería, «ibas de un grupo a otro, charlando con la gente, con un "buen rollo" increíble, como suele pasar habitualmente. Sólo buscamos divertirnos». Uno de los principales motivos de conversación era la actitud de la Asociación Zamorana de Empresarios de Hostelería (Azehos), que «consideramos que se ha "pasado" denunciando al fiscal al presidente del Consejo de la Juventud», para el que hubo palabras de respaldo por parte de los asistentes al "macrobotellón". Esta "concentración" se organizó precisamente «en apoyo del botellón y de Fernando», que representa a todas las organizaciones juveniles de la capital.

Entre los asistentes se confirmó la voluntad de continuar con esta práctica. Precisamente, la Comisión Permanente del Consejo de la Juventud tiene previsto reunirse el martes para analizar la situación creada tras la polémica iniciada desde mediados de junio y emitir un comunicado de apoyo a su presidente y, probablemente, al botellón, «ya que no existe una política de juventud en las instituciones que ofrezca a los jóvenes una alternativa de ocio diferente a ir a un bar y beber, o reunirse al aire libre y montárselo por su cuenta», apuntaba un integrante de este organismo.