El Centro de Interpretación de las Ciudades Medievales ya es una realidad tras concluirse las obras de edificación, que se enmarcan dentro del Plan de Excelencia Turística y cuyo presupuesto ha ascendido a 1.145.704 de euros. El nuevo edificio, situado en la calle Pizarro en pleno casco antiguo, está destinado a albergar proyectos museísticos que permitan informar e interpretar las ciudades medievales desde una perspectiva histórica con el objetivo de analizar cómo han influido en el desarrollo de «nuestras» ciudades y cómo influyen en el momento actual.

Al acto de presentación acudió la alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón, acompañada del concejal de Turismo, Luís Javier Alonso. «Hemos querido visitar la finalización del continente del edificio, porque tiene un significado especial ya que estamos hablando de un época importante del pasado de la ciudad», aseguró Valdeón en referencia a la obra, que ha sido financiada a partes iguales por el Ministerio de Cultura, la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de la capital.

A partir de las próximas semanas comenzará la segunda fase del proyecto que corresponde a la "musealización", con un presupuesto de 411.050 euros, lo que según Valdeón permitirá abrir el centro al público en el primer semestre del 2008. El Centro de Interpretación de las Ciudades Medievales está concebido como una integración entre museología, arquitectura y museografía, que a través del análisis del origen, funciones, diseño, estructura social, economía, manifestaciones artísticas y culturales de las ciudades medievales, en particular de Zamora, pretende averiguar el desarrollo de las ciudades de hoy en día y como las villas medievales han influido en el momento actual, mediante una información científica, rigurosa e integradora, de manera que sea comprensible para todos los visitantes con independencia de su edad y nivel informativo. «Creemos en el turismo ligado a nuestra idiosincrasia», puntualizaba la alcaldesa.

Las obras, ejecutadas en los plazos previstos por la empresa UTE Tuconsa - Sevec - Coeléctrica S.A., se reparten en un edificio de tres plantas que se elevan sobre un solar de 611 metros cuadrados. Valdeón señalaba la complejidad de la edificación, pues se enclava en un terreno de especial topografía y en la que se ha sabido compatibilizar modernidad con la conservación «de una parte de la muralla», catalogada con el Nivel de Protección 1 en el Plan Especial. La planta baja, que ocupa una superficie de 114 metros cuadrados, se destinará al control de accesos y sala de exposiciones. En la planta inferior la edificación principal está destinada también a usos expositivos, mientras que el cuerpo de edificación anejo se destinará para una cafetería y otros servicios. Los espacios para usos administrativos se encontrarán en la planta alta, donde también habrá otra gran sala de exposiciones.

Valdeón asegura que se está elaborando un plan contra los baches

La alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón, aprovechó su visita al Centro de Interpretación de las Ciudades Medievales para apuntar que el Ayuntamiento está trabajando en la creación de un informe de mantenimiento para acabar con los numerosos baches que hay en la capital. «Me he reunido con los responsables y con la Policía Municipal, y con la ayuda de los ciudadanos, recabaremos información para elaborar un plan de mantenimiento», aseguró Valdeón, quien también afirmó que la ejecución de dichas reformas las realizarán los servicios municipales, «Queremos que se centralice con los servicios municipales pero si tenemos que externalizar, lo haremos», aclaró.

Las Aceñas de Cabañales y de Olivares, pendientes de modificaciones

El Ayuntamiento no tiene decidido aún cuando se producirá la apertura al público de las Aceñas de Olivares y Cabañales. La alcaldesa Rosa Valdeón aseveró que «estamos trabajando en la modificación de las Aceñas de Olivares y de Cabañales para revitalizar ambas zonas. No creemos en obras individuales sino en conjunto».

Ambas zonas, situadas a orillas del río Duero, permanecen cerradas a pesar de que las obras ya concluyeron hace tiempo. Sin embargo, en el caso de Olivares, la ausencia de un convenio para su gestión impide que los turistas puedan disfrutar de sus molinos. Por su parte, las Aceñas de Cabañales permanecieron abiertas durante unos meses gracias a las subvenciones europeas.