La avenida de Galicia, sólo de subida desde la Morana hasta el Bolón desde este miércoles
La ejecución del tramo entre las dos nuevas glorietas de la vía de acceso a San José Obrero obliga a cortar la circulación de coches sentido bajada
Las obras de humanización de las travesías de Zamora han retomado su actividad después del parón motivado por el paréntesis navideño. Y desde este mismo miércoles se producirá un cambio de importancia en el tráfico rodado, concretamente el de entrada de la ciudad por la avenida de Galicia, que estará cortada entre la Cuesta del Bolón y la intersección con la carretera de La Hiniesta para los vehículos que viajen en ese sentido.
Los coches que suban por la Cuesta de la Morana podrán continuar por la avenida de Galicia solo en sentido salida de la ciudad hasta la Cuesta del Bolón o seguir para adelante, hasta la rotonda del Sancho. Sin embargo, los que intenten bajar desde San José Obrero no podrán continuar por la avenida de Galicia y se tendrán que meter por la Cuesta del Bolón, ya que el tramo hasta la confluencia con la carretera de La Hiniesta estará cortado en sentido bajada (entrada a la ciudad).
Y es que justo en la intersección de la avenida de Galicia con la carretera de La Hiniesta el proyecto de humanización prevé la construcción de una rotonda, y lo mismo ocurre con la intersección de la avenida de Galicia con la Cuesta del Bolón, que pasará a estar regulada también por una rotonda.
El objetivo es convertir todo el tramo en una vía de doble sentido de circulación con calzada única con un ciclo carril por sentido, eliminando así todos los desdoblamientos de carril y carriles centrales de espera para giros (como el que existe en la confluencia con la carretera de La Hiniesta).
Además, se reducirá medio metro el ancho de los carriles hasta los tres metros de ancho, lo que permitirá el ensanchamiento de las aceras.
Las zonas de aparcamiento de vehículos, al igual que los ensanchamientos de las paradas de autobús se mantendrán, aunque al desplazar la línea de bordillo de las aceras, estas zonas también se acercarán al eje de la vía.
Rotondas
Los tres principales cruces se resuelven con rotondas. La glorieta de intersección de la Avenida de Galicia (N-122) con la Cuesta del Bolón tendrá un diámetro 28,80 metros.
La intersección de la Cuesta de la Morana (N-122) con la Calle de la Hiniesta se resuelve mediante otra rotonda, con un diámetro de diseño de 28 metros. Es entre estas dos rotondas donde se centra la zona de obra a partir de hoy y por tanto condiciona el tráfico de entrada a la ciudad desde el norte.
Queda una tercera glorieta de intersección de la calle de la Puebla (N-122) con la calle del Obispo Nieto, frente a la iglesia de San Lázaro, que será un poco más pequeña, ya que tendrá un diámetro de 20 metros.
Los proyectistas, no obstante, han comprobado que a una velocidad de 30 kilómetros por hora un vehículo tipo autobús puede circular perfectamente por las rotondas con estas dimensiones, no demasiado grandes.
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