Fallece Horacio Rodríguez, sacerdote zamorano que fundó de una de las mayores escuelas católicas de Asia-Pacífico

El agustino ha fallecido en Manila a la edad de 93 años

El padre Horacio Rodríguez con un grupo de mujeres.

El padre Horacio Rodríguez con un grupo de mujeres. / Cedida

Natalia Sánchez

Natalia Sánchez

El padre Horacio Rodríguez, sacerdote natural de Villanázar (Zamora), ha fallecido este sábado en Manila (Filipinas) a los 93 años de edad.

Rodríguez fue padre fundador y antiguo rector del Colegio San Agustín (CSA) en Makati City, una de las principales escuelas católicas del país, que actualmente ya es referencia en Asia-Pacífico.

El pilar de la orden religiosa agustina en Filipinas, nacido el 12 de agosto de 1931 y se unió a la orden agustina en 1952. Tomó sus primeros votos ese año e hizo su profesión solemne tres años después, en 1955. Tras ser ordenado sacerdote al año siguiente, dejó España para una misión a Filipinas, donde finalmente se convirtió en un referente agustino a lo largo de su trayectoria.

Trayectoria

Rodríguez cumplió con sus funciones como rector de 1980 a 1984 y 1994 a 2018. También se desempeñó como director de la Escuela de Grado durante 49 años, de 1969 a 2018. Al mismo tiempo, se desempeñó como Vicario Regional del Vicariato de Oriente de 2002 a 2006.

El zamorano en una celebración eucarística.

El zamorano en una celebración eucarística. / Cedida

Al comienzo, únicamente dos sacerdotes, Ángel Rodríguez y Horacio Rodríguez, dirigían el Colegio San Agustín Makati con la ayuda de veinticuatro maestras, mientras que en la actualidad cuenta ya con casi 500 empleados. Esta escuela es hoy un referente en el sureste asiático no solamente por su impulso hacia la excelencia académica, sino también por su voluntad de evangelizar y ayudar a los más necesitados.

El CSA Makati ha expresado su adiós hacia Horacio Rodríguez: "Nuestro querido Padre Horacio fue uno de los pioneros de la escuela cuando abrió sus puertas en 1969 y una encarnación de los valores centrales agustinos de la verdad, la unidad y la caridad. Constantemente defendió la Verdad, abogó por la unidad y la amistad, y promovió la caridad y el amor fraterno por todos. Su vida es un testimonio de cómo es ser un hombre para los demás, y un hombre para todos. Será extrañado y nunca olvidado".

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