Zapadores de Renfe recalan en Zamora

Un grupo de los ferroviarios jubilados elige la capital para rememorar en la ciudad del románico sus vivencias de hace 54 años

Los integrantes de la compañía ferroviaria posan con sus acompañantes ante el Ayuntamiento. | Ana Burrieza

Los integrantes de la compañía ferroviaria posan con sus acompañantes ante el Ayuntamiento. | Ana Burrieza / Susana Arizaga

Coronaron ya las bodas de oro de su amistad hace cuatro años, pero este fin de semana repiten la cita anual desde que entraran en la XI Formación de Zapadores Ferroviarios de Renfe, "en la rama de comunicación", indica Manuel Román Muga, que ha vuelto a reunir a quince de sus compañeros, junto a diez acompañantes en su querida Zamora.

Son menos que los llegados hace once años por primera vez a la ciudad del románico, "algunos no han podido venir por circunstancias personales", aquejados de alguna dolencia física, apunta uno de aquellos estudiantes del Batallón Escuela y Prácticas de Cuatro Vientos, en Madrid, llegados desde diversos puntos del país.

Era 1969 cuando aquellos jóvenes que buscaban un medio de vida conocieron los secretos de las líneas aéreas y cableado de Renfe para ponerlo en práctica cuatro años después "repartidos entre Puente los Fierros de Oviedo, Madrid-Príncipe Pío, Madrid-Atocha, y Barcelona durante un año", recuerda Román Muga, que salió de su Zamora natal a los 18 años para hacer esa mili que le daría un puesto de trabajo en el que confiesa que fue muy feliz.

El grupo de ferroviarios en la Plaza Mayor junto a la guía de Zamora. | Ana Burrieza

El grupo de ferroviarios en la Plaza Mayor junto a la guía de Zamora. | Ana Burrieza / Susana Arizaga

Manuel Román, a lo largo de su trayectoria profesional, conoció en profundidad la transformación de las comunicaciones hasta llegar casi a la fibra óptica, instaló bifurcaciones digitales.

Hecho el curso oficial de comunicaciones de la compañía ferroviaria, por sus manos y las de sus compañeros pasaron desde "teléfono magnético de batería local, a los de batería central, los automáticos y las centrales bicordes". De su saber y su pericia dependía la precisa circulación de los trenes de todas las estaciones, el control de los mismos.

El zamorano Manuel Román (en cuclillas, primero por la derecha) con sus compañeros del Batallón Escuela de Cuatro Vientos . | Cedida

El zamorano Manuel Román (en cuclillas, primero por la derecha) con sus compañeros del Batallón Escuela de Cuatro Vientos . | Cedida / Susana Arizaga

Aquellos compañeros que forjaron una amistad duradera, todavía fluida gracias a los teléfonos móviles y las redes sociales, pisaron por primera vez Zamora hace doce años, en una de sus reuniones anuales, ya jubilados. Fue en mayo de 2001, "cuando se estaba pidiendo la llegada del AVE, del que nosotros éramos partidarios y que públicamente apoyamos en el diario a LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA. Pocos años después, se consiguió", subraya Román Muga. El grupo comenzaba el encuentro ayer en la Plaza Mayor para realizar una visita que también les llevará a otros puntos de la provincia.